Las obras del pavimento del entorno del Alcázar, en Toledo, ya han concluido y las calles afectadas se podrían abrir al tráfico durante la próxima semana (aún no se ha especificado el día hasta que los técnicos consideren que la zona está completamente consolidada), tal y como ha confirmado esta mañana la alcaldesa de la capital regional, Milagros Tolón, durante su visita esta mañana a la zona.

Losetas, adoquines de granito, arreglo de baches…

Obras que han consistido en el arreglo de baches y reposición de adoquines sueltos, una mejora del pavimento y un acabado «más resistente y con materiales nobles para dignificar un espacio con un alto valor patrimonial». Actuación que se ha llevado a cabo sobre una superficie de 2.600 metros cuadrados en las calles Carlos V, Capuchinos, Unión y La Paz.

La inversión total ha sido de unos 200.000 euros.

Antes de comenzar las obras se realizaron catas previas para elegir el mejor sistema de pavimentación, utilizando losetas y adoquines de granito con corte de cantera, con un acabado rugoso, para conseguir mejor adherencia. Y se ha usado un mortero de mayor resistencia.

«Obras que se han llevado a cabo en el plazo previsto, haciendo compatibles los trabajos y el día a día de la ciudad. Había que mejorar la imagen y la accesibilidad de una zona de alto valor monumental en pleno centro del casco histórico, garantizar su consolidación y que sea lo más resistente posible».