La Asociación de Jóvenes Agricultores (Asaja) de Castilla-La Mancha ha cifrado en más de 1.000 millones de euros las pérdidas en la agricultura y ganadería de la región en el actual ejercicio a causa, esencialmente, de la sequía que, curiosamente, «no han afectado a los bolsillos de los demás».
Así lo han expuesto en balance del año que «está medio bien» el presidente de la organización agraria, Fernando Villena, y el secretario general, José María Fresneda, quienes han sostenido las complicaciones que se viven «en las explotaciones agrarias y ganaderas» por culpa de la sequía y, también, «la impresionante falta de planificación» que ha derivado en la merma productiva de los cultivos, pero «no de la bajada de impuestos» o de normativas.
«Al final, la agricultura pagan el pato, y yo creo que vendemos mal la agricultura», ha sostenido Villena porque «parece que con que nazca la cosecha ya tenemos esperanza».
La sequía hace bajar la producción de aceite, vino y almendra
Fresneda ha sido tajante al cifrar las pérdidas en los distintos sectores y ha señalado que en aceite de oliva la producción ha bajado entre un 25-30 por 100 menos que el año pasado, unas 400.000 toneladas de aceituna para una producción de 80.000 toneladas de aceite muy irregular «con algunas zonas con pérdidas de hasta el 90 por 100».
En vino, sobre una producción de vino de 2,3 millones de uva, para una producción estimada en entre 17,5 y 18 millones de vinos y mostos, que supone una caída entre el 25 y el 30 por 100, y en cereales la merma se ha elevado hasta cerca de la mitad en una producción de unos 2,6 millones de toneladas.
Además, Fresneda ha detallado que en el sector de los frutos secos se han recolectado unas 3.000 toneladas de almendra en pepita con una bajada en un 25-30 por 100 y en el girasol, sobre 77.000 toneladas, se ha dado un 45 por 100 menos de la producción.