El 4 de octubre de 2018 las Cortes de Castilla-La Mancha aprobaban por unanimidad la Ley por una Sociedad Libre de Violencia de Género, un paso más para colocar a la región a la vanguardia en la lucha contra la violencia machista y una iniciativa muy aplaudida entre las organizaciones de mujeres que combaten esta lacra.
Entre las medidas más novedosas destaca la ayuda anual de 4.000 euros que se contempla para los hijos de madres asesinadas, una cuantía que recibirán hasta que sean mayores de edad. Serán considerados víctimas directas de la violencia de género, una consideración que, para muchos, hace justicia con los que hasta ahora han sido los grandes olvidados, quienes además tendrán una asistencia psicológica específica adaptada a sus necesidades.
También habrá una ayuda económica directa consistente en un pago único a familiares en situación de dependencia que conviviesen en el mismo domicilio que la mujer víctima de homicidio o asesinato. El acceso preferente a la vivienda a los familiares que se encarguen de los huérfanos es otro aspecto importante.
Castilla-La Mancha se ha situado igualmente en el punto de mira del Pacto de Estado que quiere llevar a cabo el Ejecutivo de Pedro Sánchez con otra de las novedades de la ley: la pérdida de la patria potestad para el padre criminal.
Por primera vez un texto ha hecho suyo el Convenio de Estambul en el que se contempla como delito todas las formas de violencia contra la mujer: la violencia física, psicológica y sexual -incluida la violación-, la mutilación genital femenina, el matrimonio forzado, el acoso, el aborto forzado y la esterilización forzada.
En los 35 artículos de la Ley por una Sociedad Libre de Violencia de Género de Castilla-La Mancha se incide en la prevención y sensibilización. Así, el texto señala que las medidas de promoción de la igualdad y de sensibilización tendrán por objeto eliminar los prejuicios basados en la idea de inferioridad o superioridad de cualquiera de los géneros o en funciones estereotipadas de mujeres y hombres, e irán encaminadas a erradicar las pautas de conducta sexistas que propician la violencia de género, siendo su principal ámbito el de la actuación formal y no formal, las organizaciones de mujeres, los medios de comunicación, productos audiovisuales y medios sociales y las campañas publicitarias.
Una asignatura de Igualdad en Primaria y Secundaria
Con este espíritu, se establece que la Junta de Comunidades desarrollará una asignatura obligatoria con contenidos relativos a igualdad, educación afectivo-sexual y prevención de la violencia de género, una asignatura a impartir en Primaria y Secundaria.
Así mismo, se introducirá de manera trasversal en los currículos de todas las asignaturas elementos que pongan en valor la igualdad, potenciando la visibilidad de la mujer,-y en historia- el origen, desarrollo y logros del movimiento feminista e historia de las mujeres.
5.103 denuncias por violencia de género
Según datos recientes del Informe de la Ley de Prevención de Malos Tratos y Protección, en 2017 en Castilla-La Mancha se presentaron 5.103 denuncias vinculadas a la violencia de género y se dictaron 1.192 órdenes de protección de las 1.593 solicitadas.
Por otro lado, el teléfono de atención a víctimas 900100 114 -que presta asesoramiento homologado de manos de profesionales especializados- recibió el pasado año 6.347 llamadas relacionadas con la violencia machista, bien directamente por la víctima o bien por profesionales o personas del entorno de la misma.
Por último, los centros de la mujer atendieron en 2017 un total de 97.701 consultas, de las cuales aproximadamente 20.000 (el 20 por 100) han estado relacionadas directamente con la violencia de género, mientras que los recursos de acogida atendieron a 254 mujeres y 259 menores.