La serie «La catedral del mar», de Antena 3, emitió ayer su último capítulo, un capítulo que tuvo como protagonista la basílica de Santa María del Mar, en Barcelona, el templo que inspiró a Ildefonso Falcones, autor de la novela del mismo nombre.
No obstante, tal y como informa la Dirección de Turismo, Comercio y Artesanía de Castilla-La Mancha a través de su cuenta de Facebook, las escenas de las mazmorras y cuadras que se pudieron ver ayer fueron rodadas en el castillo de la localidad toledana de Guadamur, un magnífico ejemplo de los castillos residenciales del siglo XV propios de la provincia que fue construido por Pedro López de Ayala, conde de Fuensalida, quien lo erigió sobre una fortaleza musulmana.
Fue usado por las tropas francesas durante la Guerra de la Independencia e incendiado. Rehabilitado, fue vuelto a incendiar durante las guerras carlistas. Ilustres personajes lo han habitado temporalmente: el matrimonio de Felipe el Hermoso y Juana la Loca, el cardenal Cisneros, el emperador Carlos V, y, como prisionera, la princesa de Éboli, encerrada aquí por orden de Felipe II.
La provincia de Toledo ha sido escenario de otros capítulos de «La catedral del Mar» ya que en 2016 se rodaron escenas en Oropesa y en La Puebla de Montalbán.