Después de unos meses de arduo e intenso trabajo, el colegio Mayol de Toledo ha obtenido recientemente el certificado de calidad Aenor UNE-EN ISP 9001 para todos sus niveles educativos –desde guardería a Bachillerato- y para todos los servicios que ofrece -desde el comedor, el laboratorio de idiomas, el club deportivo, la residencia, el servicio de orientación…-.
Así las cosas, se ha convertido en el único centro educativo de Castilla-La Mancha con este sello de calidad para todos los niveles y de los pocos que existen en España con estas características.
La obtención del certificado Aenor no es casualidad ya que, tal y como informaba a Encastillalamancha.es el presidente de este centro bilingüe y concertado, Francisco Mayol Solís, «siempre nos ha movido la necesidad de mejorar y una tendencia innovadora», innovación que se ha traducido en la digitalización del colegio –con pizarras digitales en todas las aulas-; la incorporación del bilingüismo; la puesta en marcha de laboratorios de ciencias; o el desarrollo de actividades paralelas a las aulas tales como el coro de voces blancas, talleres literarios, de teatro y de música, escuela de haikus, bookcrossing, desafíos matemáticos, club deportivo, laboratorio de idiomas o la asociación juvenil Yolma. De esta forma, «ocurre que muchas veces, durante la tarde, el centro sigue lleno de estudiantes».
Su objetivo es motivar al alumno haciendo que «el entorno del aula sea dinámico e ilusionante», siempre teniendo en cuenta que «cada alumno es diferente y que hay que tener muy en cuenta sus necesidades particulares». En opinión de Mayol Solís, «la sociedad está cambiando continuamente y debemos hacer las cosas de manera diferente».
Este centro, ubicado en la urbanización de San Bernardo de la capital regional, comenzó las tareas para obtener la certificación el pasado verano a sabiendas, tal y como les indicaron desde Aenor, de que era muy difícil obtenerla para todos los niveles. «Hemos trabajado mucho y a un ritmo alto; ha sido una labor intensa pero también muy gratificante» que al final tuvo su recompensa en la primera quincena de marzo con la certificación de Aenor, una recompensa que se traduce en un mayor grado de satisfacción del estudiante.
En términos generales, el presidente del colegio indicaba que «actualmente es necesario implantar buenas prácticas en todos los ámbitos de la sociedad. En educación el fracaso escolar es una constante que no nos podemos permitir; no podemos tener alumnos que a los 13 años han fracasado». En este sentido, y «habida cuenta de los grandes cambios que se están produciendo en este siglo», «la sociedad demanda nuevas formas de organización».
El Colegio Mayol de Toledo tiene 950 estudiantes y una plantilla de 50 docentes. Sus orígenes se remontan al año 1970 cuando ocupaba el edificio del final de la Avenida Barber de Toledo. Debido a una situación económica complicada, en 1997 surgió el nuevo Colegio Mayol, en esta ocasión, como sociedad cooperativa.