Hispania Nostra ha incluido al río Tajo a su paso por Toledo en la Lista Roja del Patrimonio. Su deteriorado estado al paso por la Ciudad Imperial no ha pasado desapercibido tampoco para esta organización y acaba de engrosar la lista por ser «un río emblemático que se encuentra muy sucio y descuidado».
Para la asociación sin ánimo de lucro que vela por la conservación del patrimonio amenazado, el río es el «motivo de la existencia de la ciudad de Toledo» y ahora está amenazado por la «contaminación». Su casco histórico está abrazado por el meandro del río y este lugar estratégico es el que eligieron los primeros pobladores hace miles de años para asentarse.
«Los primeros pobladores se asentaron en este promontorio rodeado casi por completo de agua, lo que les proporcionaba una magnífica defensa ante los ataques enemigos, abastecimiento de agua, riego para los cultivos y pesca. También supuso durante siglos un lugar de recreo y diversión para los toledados, que lamentablemente, a finales de 1960, con la creciente industrialización y los vertidos que llegaban de Madrid procedentes del Manzanares y el Henares a través del Jarama, terminó, dejando un río contaminado«, lamenta Hispania Nostra en la ficha recién publicada en su página web.
Hispania Nostra también recuerda que el Tajo está «incluido dentro de los límites de protección de Toledo como Patrimonio de la Humanidad de la Unesco».
«Al problema de la contaminación se unió el trasvase», explica la asociación
Desde 1972 el baño está prohibido por la contaminación de las aguas, pero a ese problema de contaminación «se añadió poco después la entrada en funcionamiento del Trasvase Tajo-Segura en 1979, que agravó la situación del río pues mermó en gran medida el caudal, por lo que las aguas contaminadas estaban aún más concentradas».
En la ficha dan más detalles sobre la historia que une al río más largo de la Península Ibérica. «El Tajo se adentra en la ciudad de Toledo, única capital española por la que pasa, por espacio de unos pocos kilómetros formando el denominado Torno del Tajo en la rocosa Meseta Cristalina, que convierte a la ciudad en una península rodeada de agua por todos sus flancos excepto por el norte. Este lugar está ubicado en una zona de transición geológica entre la arcillosa y fértil comarca de La Sagra y la silícea Meseta Cristalina (antesala de los Montes de Toledo), hecho que permite una enorme diversidad de recursos naturales, desde cultivos hortícolas y cereales a zonas de monte mediterráneo que ofrecían leña y madera para las construcciones o piedras de la Meseta Cristalina para la edificación».
Por último exponen la riqueza de aves que habitan en la ribera del río. «También conforma un auténtico corredor ecológico, es una zona muy rica en avifauna donde se han llegado a censar hasta 70 especies de aves diferentes, tales como cormoranes, garzas, ánades, garcetas, fochas, etc».
Y es que el río Tajo una vez que incorpora las aguas del Jarama tiene un estado deplorable, como así lo muestra este vídeo a vista de pájaro, donde se observa cómo las cristalinas aguas del Tajo se sumergen en las oscuras del Jarama.