Estos día ha vuelto a la actualidad un héroe cotidiano de esos que hay tan pocos: Román David Gómez, el guardia civil que quedó parapléjico tras recibir un disparo en el cuello en un atraco en Yuncos (Toledo), en 2013, toda vez que el próximo 22 de septiembre habrá una segunda carrera en su honor y a beneficio de los lesionados medulares, que tendrá lugar en esta localidad toledana.
https://youtu.be/PqJ6Z8BgK8M
Román David afirma que esta segunda carrera se debe a la voluntad de la alcaldesa de Yuncos, María José Gallego, quien después de que el pueblo le rindiera un merecido reconocimiento le dijo que la localidad le debía una segunda carrera (la primera fue en Toledo).
[ze_summary text=»La rehabilitación que hizo en el Hospital Nacional de Parapléjicos le devolvió la movilidad en la mano y el brazo izquierdos «]La rehabilitación que hizo en el Hospital Nacional de Parapléjicos le devolvió la movilidad en la mano y el brazo izquierdos [/ze_summary]
Este toledano no ha hecho más que intentar adaptarse a su nueva vida. Tras el atraco, la recuperación que llevó a cabo en el Hospital Nacional de Parapléjicos le permitió recuperar la movilidad del brazo izquierdo, que le había quedado inutilizado (el proyectil le afectó a la parte izquierda de su cuerpo). «No podía incluso mover los dedos de la mano izquierda, los tenía atrofiados, me pusieron una férula por la noche que me dolía mucho», recuerda.
Va a rehabilitación dos o tres veces semanales
Y es que el impacto del proyectil le hizo perder la sensibilidad del pecho para abajo. Para mantenerse en forma e intentar guardar el equilibrio, que es lo que peor lleva, Román trabaja dos o tres veces semanales en Ademto (Asociación Española de Esclerosis Múltiple de Toledo).
[ze_summary text=»Vendió el adosado que compró en Illescas y de Parapléjicos pasó a vivir a casa de sus padres, en Villasequilla»]Vendió el adosado que compró en Illescas y de Parapléjicos pasó a vivir a casa de sus padres, en Villasequilla[/ze_summary]Desde que salió del Hospital Nacional de Parapléjicos vive en casa de sus padres, en Villasequilla, donde nacieron él y su familia. Había comprado un adosado en Illescas (en cuyo puesto de la Guardia Civil trabajaba), pero lo tuvo que vender por su inaptabilidad: había que subir escaleras, las puertas eran pequeñas… En casa de sus padres bastó adaptar el baño y su dormitorio, para cuyo gasto le vino muy bien lo recaudado en la primera carrera «Corre X Román».
Una silla eléctrica le permite ponerse de pie
Ya en casa, favorece su movilidad una silla eléctrica que le permite ponerse de pie (la máxima movilidad posible es básica en los lesionados medulares, que sufren además de problemas en los huesos).
[ze_summary text=»Es pensionista, ya que tiene una invalidez reconocida de un 84 por 100″]Es pensionista, ya que tiene una invalidez reconocida de un 84 por 100[/ze_summary]A consecuencia de su paraplejía a Román David se le reconoció una invalidez del 84 por 100. Desde 2016 es pensionista. Además de trabajar en la rehabilitación, sale con sus amigos en Villasequilla. Sigue soltero. Tiene una hermana casada (muestra a su sobrina en el vídeo adjunto del reportaje).
Román David conduce un coche adaptado. Necesita de su padre para subir a él, pero una vez dentro ya conduce sin problemas, a pesar de las «pegas» que pone su padre, que no se fia del todo de su equilibrio. «Siempre tenemos esa discusión», admite Román.
Correrá en «Corre X Román» en una «handbike»
De cara a la II carrera «Corre X Román», el guardia civil se está entrenando para correr en ella en una «handbike«, en la pista del barrio toledano del Polígono. Para subirse a ella necesita ayuda, de su padre o su cuñado, pero una vez a bordo, «tira millas…», aunque reconoce que es duro. Pero quiere participar, ya que en la primera carrera le recomendaron que no lo hiciera porque tenía una escara en el sacro. Así que la tuvo que seguir en moto…
Román David: la vida sigue, con ganas. Corriendo, «por Román» y los lesionados medulares.