Tercer lunes de agosto, las vacaciones siguen su curso, pero para la cabecera del Tajo no es tiempo de relax y disfrute. La caída en picado sigue y esta semana se han dejado casi 10 hectómetro. Exactamente han sido 9,82 y ya han bajado del 11 por 100 Ahoramismo se encuentran en el 10,85 por 100, con 268,44 hectómetros cúbicos de los 2.474 que tiene de capacidad total.
El embalse de mayor capacidad, el de Buendía, ha sufrido la mayor caída. 7,59 hectómetros es la cantidad que ha perdido en los últimos siete días hasta dejar 184,91 hectómetros cúbicos tras la presa de la localidad conquense. Albergando 177,32 hectómetros, está al 10,81 por 100 de su capacidad total 1639 hectómetros cúbicos.
El compañero de fatigas de Buendía, Entrepeñas, ha tenido un descenso más suave, pero teniendo en cuenta que apenas tiene 91,12 hectómetros, los 2,23 que ha perdido también le duelen al maltrecho pantano guadalajareño. El lunes 21 de agosto a primera hora de la mañana el embalse tiene el 10,91 por 100 de los 835 hectómetros de capacidad total.
Rozando los 500 hetómetros hace un año
Está siendo uno de los peores veranos que se recuerdan en la cabecera del Tajo. La sequía asola a gran parte del país y en Castilla-La Mancha vemos como se ceba con especial énfasis en Entrepeñas y Buendía, ya que a las pocas lluvias que han caído en el año fluvial hay que sumarle los trasvases que se han ido aprobando durante el invierno y la primavera.
Una sitiación que contrasta de especial manera si echamos la vista atrás. Hace solamente un año, pese a que su situación no era la óptima, sí que los pantanos de cabacera del Tajo casi duplicaban las existencias actuales de agua. En 2016, en las mismas fechas de agosto, Entrepeñas y Buendía tenía 495,7 hectómetros cúbicos, distribuidos en Entrepeñas con 206,2 y 289,5 para Buendía.
El maltrecho Tajo presentaba esta imagen esta mañana a primera hora a su paso por el puente de San Martín en Toledo.