Todos los pueblos de Castilla-La Mancha podrían tener ficha óptica antes de 2025, incluidos los 115 núcleos de población de menos de 200 habitantes de la provincia de Toledo donde será necesaria la inversión pública para que este servicio, básico en la lucha contra la despoblación, llegue hasta sus casas.
Así lo han asegurado hoy en rueda de prensa el vicepresidente de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, y el presidente de la Diputación de Toledo, Álvaro Gutiérrez, en una comparecencia conjunta en la que han mostrado la disposición de ambas instituciones para seguir colaborando en distintos planes. Tanto en los que impulsa la Junta, como el plan de empleo y el plan de actuación en caminos, como en los que impulsa la Diputación, como son el de igualdad de género y el de lucha contra la pobreza infantil.
Un plan para llegar donde no llegan los operadores
La Junta de Castilla-La Mancha tiene previsto realizar un plan para que todos los pueblos de la región cuenten con internet de máxima velocidad. Pero, conscientes de que las operadoras no llegarán a todos ellos, van a plantear un programa con un presupuesto que podría rondar los 120 millones para que todos los pequeños núcleos de población cuenten con este servicio.
Sobre la colaboración en este plan han hablado hoy Martínez Guijarro y Gutiérrez, dentro de la ronda de contactos que está manteniendo el vicepresidente con las diputaciones provinciales para impulsar este plan y seguir colaborando en el resto.
«Queremos impulsar un plan para llegar allí donde tenemos la certeza donde los operadores no van a llegar, a los municipio de menos de 200 habitantes», ha explicado Guijarro, quien ha añadido que la implantación de la fibra óptica es una de las principales reivindicaciones que están recibiendo desde estos pequeños municipios para «saldar la brecha digital».
El plazo fijado para acometer este plan, que todavía no está ni cerrado ni presentado, es 2025. Además, quiere plantear al Gobierno de España, cuando haya, «que vengan fondos del Estado para estos municipios pequeños», puesto que esta cree que es una de las deficiencias que hay en el reparto de la financiación autonómica, porque este problema, el de que los operadores no inviertan en fibra óptica en los municipios pequeños, no ocurre o sucede en menor medida en otras regiones.
Pero para ejecutar el plan no van a esperar a que haya gobierno y por ello comenzarán a invertir «casi 120 millones de fondos de las distintas administraciones para implantar un que garantice la igualdad de oportunidades». En la provincia de Toledo serían unos 11 millones de euros los necesarios para implantar la banda ancha de máxima velocidad en los municipios pequeños.