La investigación del tiroteo que el pasado viernes dejaba un herido en Ciudad Real sigue abierta y todo apunta a un «encontronazo» entre familias de etnia gitana por «unos problemas que, al parecer, vienen acarreando desde hace tiempo».
Así lo ha asegurado el concejal de Seguridad del Ayuntamiento, David Serrano, que a preguntas de los medios durante la rueda de prensa que ha ofrecido para dar cuenta de los acuerdos de la Junta de Gobierno Local, ha matizado que los Cuerpos de Seguridad del Estado siguen trabajando para esclarecer un suceso que terminó con un trabajador de un taller mecánico cercano al lugar del tiroteo herido por una «bala de rebote».
Los hechos tuvieron lugar sobre las 16:00 horas en la carretera de Carrión, a la altura de la empresa de lavado de coches «Lavamanía». El hombre de 59 años que resultó herido se encuentra «fuera de peligro» tras haber sido intervenido para la extracción de la bala que le impactó en la zona baja del abdomen.