En cualquier país del mundo Federico Martín Bahamontes sería poco menos que Dios. Ganó el Tour de Francia, fue el primer español en hacerlo, ahí es nada, y está considerado como el mejor escalador de la historia. Con una gran diferencia todavía más a su favor con los ciclistas y escaladores actuales, y es que por las carreteras que sus coetáneos y él transitaban eran poco menos que caminos de cabras comparadas con las actuales, casi todas bien asfaltadas y casi con aire acondicionado en cada esquina.

A Bahmontes, con 90 años a sus espaldas, se le debe algo

A Bahamontes, con sus actuales 90 años, se le debe algo. Efectivamente. Qué menos que un recuerdo bien visible en su ciudad, Toledo. Por eso el domingo 6 de mayo se hará justicia con la inauguración de una escultura que se va a situar en el Paseo del Miradero.

Y por eso ya han confirmado su presencia otros cuatros ganadores españoles del Tour de Francia: Miguel Induráin, Pedro Delgado, Óscar Pereiro y Carlos Sastre. Que se dice pronto. Junto con el gran Federico, cinco vencedores de la prueba más terrible del calendario ciclista mundial. Un lujo, una forma de reconocer lo que significó Bahamontes.

Por eso el 6 de mayo volverá a ganar su «segundo» Tour.

El Ayuntamiento de Toledo y la Fundación Soliss tienen todo preparado para que un trocito de la ronda gala se celebre en la capital regional ese día.

Para que Bahamontes, ese genio de la bicicleta, vuelva a recibir el cariño masivo de la gente. Que era capaz de lo mejor y de lo peor, que bien un día te hacía el etapón del año como al siguiente se le iba un rato el raciocinio y le pasaban por aquí y por allí.

Es lo que tienen los genios, en este caso del deporte.

Es hora también de que su Museo esté en Toledo, de que los millones de visitantes que vienen a la Ciudad Imperial cada año puedan conocer un poco más de la historia (humana) de este lugar.

Pues eso…

@CesardelRioPolo

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