El Gobierno regional planteará más de 150 reivindicaciones al presidente del Gobierno de España en la reunión que el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, y Pedro Sánchez mantendrán el próximo lunes en el Palacio de la Moncloa y en la que también se analizarán las inversiones comprometidas por el Estado en la región.
En rueda de prensa para informar de los acuerdos del Consejo de Gobierno, el portavoz del Ejecutivo autonómico, Nacho Hernando, ha explicado que todas ellas, divididas por ministerios y recogidas en un documento de más de 100 páginas, están «en línea con lo que hemos estado reivindicando desde el inicio de la legislatura».
Así, ha señalado que el Ejecutivo castellano-manchego pedirá a Sánchez una reforma del sistema de financiación autonómica que soluciona la «infrafinanciación» que sufre la región en ámbitos como la sanidad, la educación o la dependencia, y que ha cifrado en más de 13.000 millones de euros, así como un reparto «más justo» de los márgenes de déficit.
El Gobierno también reivindicará que se impulsen inversiones en infraestructuras «muy localizadas», entre ellas el impulso al AVE a Talavera, la declaración de interés nacional para los servicios de la Línea de Alta Velocidad entre Cuenca y Albacete, apostar por la variante sur de la A-43, materializar la licitación de los tramos de la A-32 en la provincia de Albacete y acometer el acondicionamiento de la N-430.
En este capítulo, el Gobierno regional también reclamará avances en otras infraestructuras estratégicas para la región, como la Autovía Toledo-Ciudad Real, la Autovía de La Alcarria o la Autovía Cuenca-Albacete, además de una «mayor implicación» del Gobierno de España en las plataformas logísticas de Alcázar de San Juan y Talavera.
«Ayudaría que camináramos todos juntos hacia el fin del trasvase»
En relación a la sanidad, la educación o la Dependencia, el Gobierno de Castilla-La Mancha propondrá blindar estos servicios «esenciales» para la ciudadanía. A este respecto, Hernando se ha referido a las declaraciones del presidente del PP, Pablo Casado, a favor de recuperar las competencias en Educación y se ha preguntado si esa opinión es compartida también por el nuevo líder del PP en la región, Francisco Núñez.
El portavoz del Ejecutivo autonómico ha asegurado que «ayudaría que camináramos todos juntos hacia el fin del trasvase y que tuviéramos las cosas claras en el cementerio nuclear», además de contar con el apoyo de los «populares» en Castilla-La Mancha para blindar servicios básicos y así «poder avanzar y reivindicar con más fuerza esas mejoras que necesita Castilla-La Mancha».
El Gobierno de Castilla-La Mancha también reclamará al Ejecutivo de Pedro Sánchez que apueste por las desaladoras y la finalización del trasvase Tajo-Segura, así como la paralización de los pozos de sequía en la cuenca del Segura, además de trasladar «nuestro no más rotundo» al ATC de Villar de Cañas y que se destinen más fondos a la lucha contra la despoblación.
Hernando también ha señalado que el presidente García-Page trasladará la necesidad de restablecer el Fondo de Cohesión Sanitaria, «para que tengamos una sanidad española» y agilizar la adquisición de suelo para la construcción del nuevo campus de la Universidad de Alcalá en Guadalajara.
Otra de las reivindicaciones recogidas en el documento que se entregará a Pedro Sánchez es el incremento del número de efectivos de la Guardia Civil y la Policía Nacional ante las demandas de muchos municipios de la región y para invertir el descenso del número de efectivos en la región que se produjo con el Gobierno de Rajoy.
El portavoz ha señalado, por último, que el Ejecutivo regional no va a condicionar su capacidad a que haya o no unos nuevos Presupuestos Generales del Estado ya que, ha asegurado, «no todo tiene que ver con dinero», refiriéndose así al campus de Guadalajara o a la suspensión definitiva del ATC de Villar de Cañas, para el que este año se habían presupuesto 145 millones de euros que «podrían redirigirse a políticas de bienestar social, educación o sanidad».