El consejero de Hacienda y Administraciones Públicas, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha confirmado este jueves que los 360 millones que el Gobierno nacional debe a Castilla-La Mancha de la financiación autonómica hará «seguramente» que la región incumpla con el objetivo de déficit para este ejercicio.
Así lo ha indicado el consejero a preguntas de los medios en la Catedral de Toledo durante los actos celebrados con motivo de la Virgen del Sagrario, después de que el vicepresidente del Gobierno regional, José Luis Martínez Guijarro, avanzara ayer este extremo.
Del mismo modo, el consejero de Hacienda ha indicado que la región está empezando a tener «tensiones de tesorería» ya que esos 360 millones son «mucho dinero, teniendo en cuenta que hay gastos desde enero que debían financiarse con el dinero de esos recursos previstos en las entregas a cuenta que nos comunicaron el pasado año».
El consejero ha afirmado que no cumplir con el déficit significaría que la comunidad autónoma tenga que elaborar planes económicos financieros de ajuste. «Pero en este caso es absurdo porque la causa no es imputable a las comunidades autónomas sino al Estado por la falta de presupuestos».
«Podríamos elaborar planes de ajuste pero cuando nos den el dinero que nos corresponde esos planes de ajuste no serían necesarios», ha señalado, para agregar que es de la opinión de que esos menores ingresos para la región «no se tienen que producir» y que los planes de ajuste no tienen sentido.
Preguntado por la bajada de impuestos anunciada por la presidenta del a Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha apuntado que es «un poco absurdo» bajar impuestos al mismo tiempo estar pidiendo más recursos para financiación autonómica.
«Bajar impuestos lleva acompañado siempre un recorte en el gasto y es bueno que los ciudadanos sepan que cuando se bajan los impuestos también se rebaja el gasto y hay que informales de la parte del gasto y nos solamente del ingreso».