Lo ha informado hoy la Asociación de Municipios Ribereños de los Embalses de Entrepeñas y Buendía: Alcocer es el último de los pueblos ribereños que tienen que ser abastecidos con cisternas debido a la escasez de agua, una circunstancia crítica que resulta paradójica dado lo cercanos que están de los embalses.
Tal y como han informado esta misma mañana fuentes de la referida asociación, Alcocer se suma así a otros cuatro pueblos ribereños que están teniendo que recurrir a los camiones cistena para un abastecimiento tan básico, como son Chillarón del Rey, Mantiel, El Olivar y Alique, municipios a los que sumarles dos pedanías: Cereceda (de Pareja) y Córcoles (de Sacedón) y una urbanización, la de Valdenaya (Trillo).
Esta forma de abastecimiento a siete núcleos urbanos ribereños da una idea cabal de la crítica situación por la que atraviesan los embalses de cabecera, tan grave que llega a afectar al suministro básicos de estos vecinos guadalajareños.
Por último, la asociación ha criticado «el retraso que sufre la nueva e interminable Red de abastecimiento de Morillejo, que debería llevar abierta desde 2014, debido a los recortes».
También censuran que el dinero que debería haber ido a dicha red «ha beneficiado a los Decretos de Sequía al Segura (30 millones de euros) y a las obras de mantenimiento del propio trasvase», responsabilidades que achacan a la «Dirección General del Agua, con Liana Ardiles al frente, y a la nefasta gestión del Ministerio de Agricultura y el Memorándum de Entendimiento del Tajo«.