La familia de José Ángel de Jesús Encinas ha asistido estos días a sendos actos por la memoria del joven talaverano, que fue asesinado por la banda terrorista ETA junto a su compañera Irene Fernández Perera el 20 de agosto del año 2000.
Los actos de homenaje a los dos guardias civiles asesinados se han celebrado en Sallent de Gállego (Huesca), donde tuvo lugar el atentado, y en Talavera de la Reina, respectivamente, según ha explicado a Efe su padre, José de Jesús.
El primero de los actos tuvo lugar en la localidad oscense de Sallent de Gállego, allí familiares y amigos asistieron el pasado 20 de agosto a una misa oficiada por el obispo de Jaca y al posterior homenaje floral en la plaza, que se encuentra junto al Cuartel de la Guardia Civil donde prestaban sus servicios José Ángel e Irene, donde se perpetró el atentado terrorista.
José de Jesús ha agradecido, en declaraciones a Efe, la presencia multitudinaria de autoridades civiles y militares, así como de personas llegadas de varios puntos de Aragón, Navarra o el País Vasco, entre otras.
«Te sientes muy arropado y orgulloso de que esto no caiga en el olvido y se reivindique la memoria de las víctimas», ha señalado emocionado el padre del talaverano, al que se le dedicó el nombre del polideportivo municipal ubicado en la calle Real Fábrica de Sedas con Paseo Padre Juan de Mariana.
En este quince aniversario, el padre de José Ángel ha dicho que «este dolor lo llevamos día a día, aunque en fechas puntuales se agudiza, pero tanto la familia como los amigos nos sentimos muy arropados por la sociedad en general», al mismo tiempo que ha reconocido que «es un estímulo muy grande, aunque el sentimiento es crónico y seguirá ahí mientras perduremos en esta vida».
Respecto a la actualidad de ETA, De Jesús ha declarado que «siguen ahí, ni han pedido perdón ni han entregado las armas, pero hay una cantidad de privilegios que están concediendo a estos asesinos -como acercamiento a las cárceles vascas, reinserciones o beneficios penitenciarios- que nos llena de impotencia y rabia», ha apostillado.
A las 20:30 horas de ayer se ofició una misa por la memoria del talaverano, que hoy tendría 37 años, en la Iglesia de las Madres Bernardas de Talavera, por lo que el padre ha añadido que «solo nos queda luchar con el arma infalible que es la memoria, para que no se olvide a nuestros seres queridos ni el daño que día a día soportamos las víctimas del terrorismo», ha concluido.