El presidente de la Asociación de municipios ribereños de los embalses de Entrepeñas y Buendía, Francisco Pérez Torrecilla, ha avanzado que ante la «alarmante» situación que prevén para el próximo verano llevarán a cabo acciones «de protesta, reivindicativas y de presión» esta primavera.
La asociación ha celebrado su asamblea general ordinaria en el Ayuntamiento de Sacedón (Guadalajara), donde tiene la sede, en la que ha procedido, entre otros asuntos, a aprobar por unanimidad las cuentas del ejercicio 2016.
También ha acordado el aumento de las cuotas para 2017 debido a la «nula aportación de recursos económicos de otras administraciones» ya que desde el año 2010 no han recibido «ni un solo euro de ayuda externa», ha señalado el colectivo en nota de prensa.
Pérez Torrecilla ha dicho que el último trasvase, aprobado en enero, ha supuesto que salgan de los embalses 20 hectómetros cúbicos de agua.
«Desde una comarca seca, cuyos embalses están al 17 por 100 de su capacidad, hasta una comarca cubierta por las nieves e inundada por las lluvias varias veces durante este invierno», ha criticado.
El presidente de los municipios ribereños ha indicado que después de 37 años de funcionamiento «ha quedado sobradamente constatado que el trasvase Tajo-Segura es una infraestructura absolutamente irracional y que las leyes y normas que regulan su funcionamiento son tremendamente injustas e insolidarias» y ha recalcado que con el trasvase aprobado para enero «queda certificado el carácter sectario de esta infraestructura gestionada por el Estado».
Los embalses de cabecera del Tajo tienen ahora 55 hectómetros cúbicos menos de agua almacenada que en la misma fecha de 2016 y 130 hectómetros cúbicos menos que en 2015, «año en el que tuvimos que abastecer a varios municipios con cisternas y Sacedón llegó al límite de las posibilidades de su sistema de captación y elevación de agua».
Teniendo en cuenta la «alarmante» situación que se presenta para el verano el presidente de la asociación ha propuesto a la asamblea llevar a cabo «acciones de protesta, reivindicativas y de presión» a partir de primavera.
«El objetivo es informar y calar en la opinión pública para presionar al Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente de España, que es de quien depende el trasvase, para que, de forma urgente, tome las medidas necesarias que impidan el desastre socioeconómico que se prevé de nuevo para este verano», ha apuntado.