Brenno Ambrosini va a interpretar este próximo lunes en el Centro Cultural Ibercaja de Guadalajara (calle Doctor Fleming, 2, a partir de las 19:30 horas) un concierto de piano basado, fundamentalmente, en sonatas de piano escritas por Ludwig van Beethoven.
Brenno Ambrosini.
Siendo aún un estudiante de piano en su Venecia natal, alcanzar la perfección en la interpretación de algunas de las obras más complicadas para este instrumento escritas por el genio alemán se convirtió en una obsesión para Ambrosini. Años después de lograrla, puesto que hay quien eleva las interpretaciones del italiano a la altura de las del pianista referente en Beethoven, Wilhelm Kempff, hace sólo unos meses, el músico decidía retomarlas después de años sin incluirlas en sus conciertos.
El programa que ha elegido en esta ocasión es coincidente en una parte con el que interpretó hace unos días en El Pósito de Sigüenza. Ante un auditorio doncelino prácticamente lleno, el pianista emocionó hasta la lágrima a muchos de los asistentes, que le aplaudieron largamente, incluso puestos en pie. Ambrosini espera repetir el éxito en Guadalajara, una ciudad en la que la Asociación Bell´Arte Europa, de la que forma parte Ambrosini, está iniciando la programación de ciclos de música clásica, en esta ocasión de la mano de Ibercaja.
Beethoveniano hasta la médula, Ambrosini, recordando sus primeros pasos en el mundo del piano, ha encontrado en partituras como la de la Sonata 23, Op. 57, conocida como la «Appassionata», una inspiración especial. Esa fertilidad creativa, unida a su madurez artística y a un reconocido y premiado virtuosismo, le colocan en el que quizá sea el mejor momento de su ya dilatada carrera. Además de la «Appassionata», Breno interpretará también en Guadalajara la Sonata 32 Op. 111, a la que considera «el testamento poético de Beethoven, puesto que es imposible transmitir más sentimientos, más variados y profundos, en una sola partitura», valora el italiano. Estas dos obras, sólo tienen en común a su autor y la dificultad extrema que implica tocarlas, puesto que su energía y musicalidad son opuestas.
El programa del concierto de este próximo lunes incluirá también otras tres obras adicionales, con las que el pianista completará su recorrido musical preferido por los siglos XVIII, XIX y XX. Después del dúo soprano-piano de Irina Tymchuk y Bernadetta Raatz, el concierto de Ambrosini será el segundo del ciclo que la Asociación Bell´Arte Europa ha programado en colaboración con el Centro Cultural Ibercaja. El día 28 de noviembre el ciclo finalizará con un recital que correrá a cargo de Agata Raatz, al violín, y Marcin Fleszar, al piano.