El Gobierno de Castilla-La Mancha implantará en todos los hospitales de referencia un plan de abordaje multidisciplinar del Trastorno del Espectro Autista (TEA), tal y como ha anunciado hoy en Ciudad Real el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz.
Fernández Sanz, que ha participado hoy en las II Jornadas sobre Autismo, organizadas por la Asociación Autrade, ha comentado que el Plan de Abordaje Multidisciplinar para Trastornos del Espectro Autista (Pamtea) se extenderá siguiendo el modelo del proyecto que se desarrolla en el Hospital de Talavera de la Reina.
El consejero ha participado en unas jornadas sobre autismo en Ciudad Real.
El consejero ha destacado la importancia de contar con un diagnóstico precoz y establecer un sistema de cribado que garantice la detección de cualquier signo de alerta desde los primeros meses.
Para ello, ha advertido de que el papel de la Atención Primaria es fundamental, ya que a partir de los dos años es posible detectar complicaciones asociadas al procesamiento de estímulos sensoriales, alteraciones en la conducta o dificultades para la comunicación e interacción social.
Y ha subrayado que «crear planes de coordinación entre los niveles asistenciales y trabajar de forma multidisciplinar para dar una respuesta integral es una prioridad».
Existen factores que van a tener una influencia determinante en el desarrollo de la persona con Trastorno del Espectro Autista y que «son necesarios abordar entre distintos ámbitos, no sólo el asistencial, también desde el mundo de la Educación y de los Servicios Sociales», ha afirmado el consejero.
Y ha subrayado que, en el Gobierno de Castilla-La Mancha, ya se ha iniciado un trabajo conjunto entre las Consejerías de Educación, Bienestar Social y Sanidad en ese sentido.
Fernández Sanz ha hablado de la creación de un equipo de valoración y diagnóstico en el Hospital General Universitario de Ciudad Real, así como las continuas reuniones que el servicio de Salud Mental Infanto-Juvenil, junto al equipo docente de Atención Hospitalaria de esta gerencia, realiza con los coordinadores de los centros educativos.
«La atención integral debe contemplar las necesidades específicas de cada paciente con TEA de manera que podamos adaptar la atención sanitaria y las condiciones en las que ésta se presta», ha recalcado Fernández Sanz.
Y ha concluido que la eliminación de las esperas a través de la tarjeta sanitaria prioritaria o la regulación de la Escuela de Pacientes con TEA son dos ejemplos de este tipo de abordaje.