El delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, José Julián Gregorio, ha confirmado hoy que el Centro de Recuperación de Minusválidos Físicos (CRMF) de Albacete tuvo que ser tratado por un foco de legionela a mitad de mes.
El sindicato CSI-F había denunciado este hecho y pedido la dimisión del director del centro, por entender que no se informó adecuadamente a usuarios y trabajadores.
El delegado, preguntado hoy en Albacete por esta denuncia, que hace referencia a un centro estatal dependiente del Imserso y el Ministerio de Sanidad, ha comentado que todos los protocolos se aplicaron correctamente.
Gregorio ha dicho que este centro tiene un contrato con una empresa para hacer revisiones y análisis periódicos, «y cuando vieron unos resultados que podían ser positivos se procedió a la limpieza y el centro se cerró durante un par de días» para hacer la desinfección.
El delegado ha dicho que el protocolo «ha funcionado perfectamente y no ha habido ningún caso de legionela ni nadie ha tenido un problema».
El foco «se detectó a tiempo y ahora han vuelto estos chicos», pero también «se seguirán haciendo los pertinentes controles».
Respecto a la denuncia de CSI-F, que decía que los trabajadores del CRMF no fueron informados, y a los usuarios se les dijo que era una «avería general» y no un foco de legionela, el delegado ha dicho que no es así: «a los trabajadores se les avisó, lo sé», y no entra en las «desavenencias» internas del centro.