La karateka talaverana Sandra Sánchez no deja de ser actualidad, para su suerte, porque no para de generar muy buenas noticias, siempre en kata. Este año 2016 ha sido pletórico para ella, impresionante: acaba de lograr la medalla de bronce en el Mundial pero antes ganó el Campeonato de Europa, los Juegos Europeos y la Copa Iberoamericana, además de ser la número uno del ránking internacional. ¿Puede pedir más? «Siempre se puede pedir más. Yo lo que hago es proponerme metas siempre, por ejemplo lograr que nunca me levanten banderas en contra», responde.
Por cierto, ella es otro deportista talaverano más en la élite. ¿Qué tiene el deporte en Talavera?: «¿La cerámica quizá, pero no se come, ja, ja!», bromea la supercampeona en el tatami y también en simpatía.
Sobre el Mundial: objetivo cumplido, ya que iba a por la medalla. Ganar a Japón lo tenía muy difícil: «Son la cuna de este deporte, lo que pesa mucho sobre los árbitros, levantar la bandera en su contra les cuesta, aunque técnicamente sean muy buenos…», explica. Para la pletórica medalla de bronce, el combate más duro (ganó seis) fue el de la presea, ya que, por lo que se jugaba, le influyeron «la tensión, la presión», el hecho de que compitiese de alguna manera contra ella misma. De cualquier forma la medalla le sabe a gloria: «Hace tan solo dos años, cuando se disputaba el Mundial de Bremen, veía un imposible acceder a este torneo, observaba a mis ídolos por la tele», comenta.
La penúltima vez que encastillalamancha.es habló con Sandra Sánchez decía que su posible regreso a España dependía en buena parte del resultado que obtuviese en el Mundial: pues sí, regresa de Dubai, donde ha vivido un tiempo. De hecho, está cerrando su retorno. En unos días su vuelta será un hecho. La circunstancia favorable de que su marido, Jesús de Moral, sea seleccionador nacional, ha sido determinante para que haya tomado esta decisión. Ahora empieza «una vida nueva» en la que la preparación para los Juegos Olímpicos 2020 (los primeros para este deporte) serán su piedra angular.
Vida nueva que se toma con calma, porque sabe lo difícil que resulta en España «solo entrenar». Precisamente el hecho de que el kárate sea ya deporte olímpico abre la posibilidad de que en 2017 pueda entrar en las becas ADO, pero claro, solo empezaría a cobrar en 2018 en función de sus resultados de 2017. «Y hasta entonces, pasa el tiempo…», constata quien sabe que en España los karatekas no son profesionales.
SIGUE SU ESPLENDOR DEPORTIVO EN PLENA MADUREZ
En un reportaje anterior sobre Sandra Sánchez de encastillalamancha.es, se constataba una realidad: Sandra Sánchez es un ejemplo paradigmático de máximo esplendor en la madurez. Ella explica por qué: a pesar de que siempre lograba grandes resultados, su edad siempre ha resultado un hándicap para salir a competir fuera de España, dado que al final, además de los logros, la elección siempre ha sido discrecional. Ella misma, la propia Sandra, se ha encargado de demostrar que esas elecciones eran equivocadas: la talaverana tiene 35 años y está mejor que nunca. Es una de las mejores deportistas españolas en este momento.
Por cierto: Sandra Sánchez es de Talavera. ¿Qué tiene Talavera para parir deportistas tan buenos? «¡La cerámica quizá, pero no se come, ja, ja!, bromea la karateka, cuya simpatía es enorme. La supercampeona tiene ante sí, el próximo mes de enero, la disputa del Open de París, la competición más importante de la Liga Mundial. Va a por todas, cómo no.