«La mayor ilusión que me llevo es que lo voy a ver en vida, que era mi deseo; y con esto hemos llegado a la meta, ya lo tengo al alcance de la mano».
Milagros Tolón, alcaldesa de Toledo; y el gran Federico Martín Bahamontes; entre Eduardo Sánchez Butragueño, director de la Fundación Soliss; y el autor de la estatua, el valenciano Javier Molina Gil.
Lo ha dicho esta mañana un genio de la bicicleta, Federico Martín Bahamontes, durante la presentación en el Ayuntamiento de Toledo del II Premio de Escultura «Julio Pascual», que en esta ocasión se le dedica a quien fuera ganador del Tour de Francia cuando el ciclismo se hacía con bicis «a pedales». Junto a él ha estado la alcaldesa, Milagros Tolón; y varios concejales.
Un concurso que ha organizado la Fundación Soliss y cuya escultura ganadora representa al «Águila de Toledo», como se le conocía, y recuerda, a Bahamontes, subiendo la montaña el día que ganó el Tour, como se ha podido ver en la «miniatura» presentada hoy. Una escultura ya real que será inaugurada en primavera, en la calle Venancio González, a la entrada del Miradero.
Tolón ha recalcado que con esta escultura se cumplirá un doble enfoque, «embellecer nuestro casco histórico y, lo más importante, resaltar la personalidad y la figura del principal deportista que ha tenido, y tiene, la ciudad de Toledo».
En el emotivo acto no han faltado el director de la Fundación Soliss, Eduardo Sánchez Butragueño; y el escultor valenciano Javier Molina Gil, quien ha hecho posible «el espíritu deportivo de Fede subiendo esas cuestas que tan famoso le han hecho», como ha señalado la alcaldesa.