Castilla-La Mancha ha reducido su déficit en un año, desde septiembre de 2015 hasta septiembre de 2016, en 106 millones. O, lo que es lo mismo, de los 314 millones que tenía en la balanza del déficit hace un año ha pasado a los 208 actuales, tal y como ha señalado el Gobierno regional tras conocer los datos del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas.
Juan Alfonso Ruiz Molina, consejero de Hacienda y Administraciones Públicas.
El déficit en septiembre se situó en el 0,53 por 100 del Producto Interior Bruto (PIB), por lo que sigue cumpliendo con el objetivo para este año, que es del 0,7 por 100.
Un compromiso, según la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas, «que es compatible con la recuperación social y económica de la región, una meta en la que destaca la apuesta del Gobierno regional por la Sanidad, la Educación y los Servicios Sociales, además del impulso de la actividad económica y del empleo».
Para cumplir con el objetivo de estabilidad presupuestaria, «el Ministerio de Hacienda no ha requerido a Castilla-La Mancha llevar a cabo ninguna medida excepcional, como ha sido el de otras comunidades autónomas».
También «continúa disminuyendo el período de pago a proveedores, que en septiembre era de 18 días, dos menos que en agosto y 23 antes que la media de las comunidades».