El pasado 14 de diciembre una nueva imagen del Cristo de las Cuchilladas o de la Misericordia se volvió a colocar en la hornacina que hay en un rincón de la plaza de San Justo del casco histórico de Toledo. El «toledanista» Jorge Miranda estuvo empeñado en la restauración de esta imagen y lo consiguió cuando el artista toledano Fernando Aranda Alonso recogió el reto y pintó una nueva imagen para la hornacina, según informa a Encastillalamancha.es Carlos Martín Fuentes.
Imagen del Cristo de las Cuchilladas que se encuentra en la hornacina de San Justo.
Los operarios del la Escuela Taller colocaron la imagen junto con un farolillo restaurado que pertenecía a una antigua cofradía de la parroquia de San Justo. Todavía no se ha producido una inauduración oficial, solo la llevada a cabo por el párroco de San Justo y se espera que en breve se realice una inauguración por parte de las autoridades.
47 años ha estado la hornacina vacía desde el robo en los años 70 del original Cristo de las Cuchillas o de la Misericordia, relacionada con la leyenda de Silvia y Ayala. La hornacina data del siglo XVII, en la época del cardenal Borbón.
Varios años lleva Jorge Miranda intentando que la hornacina de la plaza de San Justo volviese a su esplendor. No lo consiguió hasta que el pintor Fernando Aranda Alonso se hizo cargo de forma altruista para que el Cristo luciese de nuevo en esta plaza toledana.