El diputado regional del PSOE Miguel González ha respondido hoy al PP que no se preocupe por el destino del dinero procedente de la financiación autonómica, porque el Gobierno regional lo va a destinar a «recuperar los destrozos de Cospedal en cuatro años».
En una rueda de prensa en las Cortes de Castilla-La Mancha, González ha insistido en que el PP no se preocupe, «que todo el dinero que venga se va a dedicar a recuperar lo que Cospedal destrozó en cuatro años: los derechos sociales, el estado del bienestar y las políticas de impulso económico».
El diputado regional socialista ha resaltado que el presidente de la comunidad, Emiliano García-Page, «trabaja para las personas», frente a la «oposición destructiva» que ejerce el PP.
Ha subrayado también el buen comportamiento de la economía castellano-manchega y ha mencionado, por ejemplo, que es la segunda comunidad autónoma que paga más rápido a los proveedores, en una media de 16 días, la mitad de tiempo que en el conjunto de España.
Asimismo, ha continuado, el crecimiento económico de la región es superior a la media nacional según el informe de Funcas.
González ha pedido al Gobierno de España que «no ponga arena» en la recuperación de Castilla-La Mancha, que «no utilice chantajes y diga ya las previsiones de ingresos que vamos a recibir y no esconda ese dato», así como «que ayude a las comunidades autónomas a realizar los presupuestos».
El diputado regional del PSOE ha solicitado también al Gobierno de España que «no discrimine a las comunidades autónomas en la exigencia del objetivo de déficit», al tiempo que ha garantizado que la Junta de Comunidades aboga por garantizar los derechos de todos los ciudadanos «ya vivan en Huete o en Carabanchel».
También ha dicho que la sanidad «hoy está mejor» y por eso el presidente regional «puede visitar la sanidad pública», algo que ha afirmado no hizo la anterior presidenta de la región, María Dolores de Cospedal.
Respecto a los presupuestos regionales, ha indicado que el PSOE no los pacta con el PP porque «la derecha tiene una nula sensibilidad social».