Nació en Madrid, pero llegó a Toledo hace ya 31 años, ahí es nada, «soy toledana de adopción y me siento toledana, he vivido más años aquí que en Madrid». Licenciada en Pedagogía, es maestra y milita en el PSOE «desde hace muchos años», aunque su primera incursión en la primera línea de la política fue cuando sustituyó como concejala, a mediados de 2014, a Jesús Nicolás en el Ayuntamiento de Toledo. Entonces gobernaba Emiliano García-Page, pero siguió cuando Milagros Tolón, actual alcaldesa, conformó su candidatura.
Hoy, Rosana Rodríguez Pérez es la concejala de Turismo y Artesanía de la capital regional. Y entre sus aficiones está leer, escuchar música, cantar (escuchen el audio que les hemos dejado de 10 segundos cantando «Como yo te amo», de la mismísima Rocío Jurado), pasear a mi perro Teo…».
Por cierto, están leyendo la Entrevista Irreverente de encastillalamancha.es.
Sigan…
PARA VER LA GALERÍA DE FOTOGRAFÍAS, PINCHE EN LA IMAGEN O SOBRE ESTA LÍNEA
Recuérdeme el día que llegó al aeropuerto de Barajas con la intención de coger un vuelo a Londres y comprobó que su DNI…
Ja, ja, ja… Bueno, eso fue un despiste. Mi marido y yo nos fuimos a Londres y el avión salía a las siete y media de la mañana. Queríamos aprovechar, era Semana Santa, por lo que íbamos a apurar el máximo posible. Llegué al mostrador de Iberia y enseñé el DNI. Y la señorita me dijo que yo no podía viajar. La contesté que por qué no, que era mi DNI, pero ella dijo: es que este DNI está caducado. La dijer que era imposible, que caducaba el año siguiente… Pero no, me había equivocado, había caducado el año anterior. Imagínate, habíamos llegado dos horas antes para facturar… ¡Se te queda la cara que no sabes qué hacer! ¡Que pierdes todo! Que no solo viajaba yo, también mi marido…
¿Cómo lo solucionaron?
Pues la señorita, muy amable, nos dijo que había una Comisaría de Policía en el mismo aeropuerto y que me podían hacer un pasaporte provisional. Pero al ser Semana Santa, me dijo, no sabía si… Mientras, vi por allí a un estudiante despistado que se tenía que haber ido a Grecia con sus compañeros pero que se había quedado en tierra por el mismo problema que yo. Pero bueno, tardaron un poco en hacerme el pasaporte y logramos coger un vuelo posterior, aunque en vez de aterrizar en el aeropuerto más cercano a Londres llegamos al que está a una hora y media. Cogimos un taxi que nos cobró una fortuna porque como no sabíamos que estaba tan lejos… Todavía guardo el pasaporte provisional que me hice con una cara terrorífica porque, claro, la cara que tenía de disgusto cuando me hice las fotos en un fotomatón…
Le gusta el karaoke…
Sí, me gusta mucho el karaoke… Ja, ja, ja… ¡Y canto! Me gusta mucho cantar.
¿Qué canta?
Canto música de todo tipo… Me gusta Rocío Jurado…
Creo que incluso canta con la alcaldesa, Milagros Tolón.
Sí. He cantado alguna canción de Rocío Jurado con ella, sí. «Como una ola». Y Mocedades con «Eres tú»… Yo soy muy de karaoke, tengo una pandilla de toda la vida, desde que éramos adolescentes, y nos gustaban mucho los guateques. Una vez al año hacemos uno con la pandilla, con música lenta, movida, cantando las canciones de los Beatles, de lo que nos gusta.
Venga, arránquese y cánteme algo…
Escuchen el audio incorporado en la entrevista.
Casó a su propia hija…
Sí, casé a mi hija en el ayuntamiento. Fue muy emocionante, muy bonita. Mi hija me lo pidió y al principio le dije que no por si me emocionaba demasiado o no iba a poder concluir la ceremonia… Luego lo pensé y dije: vamos a ver, es tu hija, te ha pedido un sueño y lo hice. Tuve dos momentos en los que casi me quebré, uno al principio de la ceremonia, pero al momento me controlé; y luego hicimos arras, y esas arras venían de mi familia y se había producido un fallecimiento hacía poco, recordé a esa persona y en ese momento me emocioné mucho. La verdad es que me gustó. Incluso si se casa alguno más de mis hijos, igual… ¡Los caso!
Una vez terminada la Capitalidad Gastronómica que ostentó Toledo en 2016… ¿Un plato que cocine bien la concejala de Turismo?
La verdad es que, no es por nada, pero creo que no cocino mal. A ver… Te voy a dar un plato fuera de lo normal. Hago un pastel de berenjenas con bacalao muy bueno, que me dicen mis hijos y mi marido que está riquísimo.
¿Y para comer usted?
Yo suelo pedir más pescado que carne, me gusta mucho la merluza en sus diversas opciones. Pero lo que suelo hacer cuando voy a un sitio es pedir el plato típico del lugar. Si voy a la sierra pido venado…
¿Le ha quitado muchas noches de sueño el año gastronómico?
Muchas… ¡Muchísimas noches de sueño! A estas alturas del año pasado estaba muy preocupada porque era una responsabilidad muy grande la que teníamos como equipo de Gobierno. Sí, he pasado muchas horas sin dormir, te lo reconozco. Es un peso muy grande porque hay que preparar muchas cosas: promoción, actividades, hay que conciliar a muchas personas en muchas reuniones, tienes un año por delante, es un año muy duro… Pero al final estamos contentos porque todo ha salido muy bien. Tengo que agradecérselo a mi equipo también, que se ha portado muy bien conmigo.
¿Toledo es una ciudad cara para comer, para tapear?
Creo que Toledo fue en su día una ciudad cara, pero creo que ya no. Ahora tiene un buen ajuste entre los precios y la calidad que ofrece. Los hosteleros se van dando cuenta, cada vez más, de que hay que combinar esas dos opciones, calidad y precio, y cada vez es una ciudad que ofrece mayor calidad y a mejor precio.
¿Son muy quejicas los hosteleros?
Ja, ja, ja… Bueno, conmigo no son quejicas, no sé si con el resto se quejarán o no… He descubierto que trabajan un montón y es cierto que merecen todo nuestro esfuerzo.
Quédese con una de las actividades que se desarrollaron durante el año de la Capitalidad Gastronómica.
¿Una? Pues… Tendría muchas. ¿Me dejas dos?
Venga, dos.
Una, las cenas a ciegas, que me parecieron preciosas por toda la emocionalidad que había detrás de ese proyecto, porque hubo muchas parejas que vinieron a celebrar momentos importantes en su vida, incluso uno de los hosteleros que las dio se le llenaban los ojos de lágrimas; y dos, la Feria del Dulce, porque sacamos a los conventos e hicimos una muy buena labor con todas las hermanas que viven o casi sobreviven en esos espacios tan monumentales. Sirvió para dar a conocer ese otro patrimonio que creo que no era lo suficientemente conocido.
¿Una ciudad para visitar donde no ha estado?
Mi sueño es visitar Perú, conocer Machu Pichu. Ha sido el sueño de toda mi vida. Cada año que pasa me preocupa más que me cargo de años y creo que hay que conocerla cuando eres más joven.
Y de las que ha visitado, ¿con cuál se queda?
Ya que hablamos del marco internacional, por no comprometerme con nadie dentro de España, pues Praga. Fue mi gran… Me encantó. Aunque viviría en París. Si tuviera que elegir una ciudad para vivir fuera de España elegiría París sin ninguna duda.
¿Qué personaje famoso le gustaría que viniera a Toledo?
A ver, personaje… En el marco de lo atemporal, me hubiera gustado mucho que viniera Quevedo, que me parece un personaje divertidísimo. Creo que incluso sería periodista en los tiempos que corren, porque narraba la sociedad… Con un tono irónico…
¿Le gustaría, algún día, ser la alcaldesa de Toledo?
Ehhhhh… No. ¡Directamente! No, no… Con ser concejala me conformo, estoy muy contenta…
¿La ha sorprendido el trabajo que conlleva ser concejala en una ciudad como Toledo?
Sí. Tiene mucho trabajo. Mucha gente me ha dicho, durante el año gastronómico, que hemos trabajado un montón. También señalaban que mucha gente debería pasar por eso para saber lo que trabajamos. 24 horas al día, siete días a la semana. Y eso es muy duro, pero también muy bonito. Sobre todo cuando te llama gente y te dice, por teléfono… Perdona, es que me han dado tu teléfono y no sabía si llamarte. Y yo contesto: ¿pero por qué no me vas a llamar? ¡Claro que sí! Estamos a pie de calle y en primera línea.
¿Alguna anécdota del año de la Capitalidad Gastronómica?
Dimos un premio al marqués de Griñón, vino con su pareja actual, son agradabilísimos los dos, y tomaron unas imágenes. Imágenes de recurso que, parece ser, han sido la base para dar otra serie de noticias sobre el marqués en las televisiones. Ya sabes el efecto, mucha gente ve los programas de corazón. Y muchos me decían que me habían visto en la tele con el marqués, como algo sorprendente… Y yo pensaba: madre mía, con todo lo que trabajamos… Pero bien, bien, es una anécdota.
¿Quién fue su primer amor y a qué edad?
Yo soy muy… ¡Mi primer amor ha sido mi marido! Ja, ja, ja… A los 19 años. Éramos muy jóvenes los dos. Él 20 y yo 19. Y hasta hoy… La verdad es que estoy muy contenta con él, ¡no lo cambio!
¿Le han dado muchas calabazas amorosas?
No… ¡Las he dado yo! Sí, sí, sí… ¡Unas poquitas sí! Con esto del flirteo…
¿Usted hubiera dado la orden de matar a Bin Laden?
Yo no hubiera dado nunca la orden de matar a Bin Laden. Ni a Bin Laden ni a nadie. Lo que sí hubiera hecho es dar la orden de apresarlo y juzgarlo.
¿Alguna fobia confesable?
Tengo un poco de fobia, creo que es una cosa muy común, a los espacios cerrados. Cuando hay mucha gente en un espacio cerrado, pero no es una claustrofobia muy seria.
¿Es partidaria de que las parejas de homosexuales adopten niños?
Pues mira, ¿por qué no? He tenido una trayectoria pedagógica, vengo del mundo de la enseñanza y he visto a muchos niños sufrir por problemas en sus casas, de malos tratos entre los padres, de tensiones… Y eran parejas de heterosexuales. Creo que los niños se tienen que desarrollar en entornos positivos y emocionalmente saludables, por lo que da igual la condición sexual de los padres.
¿Alguna anécdota en un viaje?
Recuerdo que en el viaje a Praga fuimos a un balneario en el que había que beber el agua de las nueve fuentes para curarte de todo, y yo me compré la jarrita decidida a tomar el agua… Bebí y aquello era… No bebí más, ¡prefería enfermar a beber todo eso, vamos!
¿Algo desconocido de Rosana Rodríguez que nos sorprendería?
Ehhhhhh… No sé… No sé si sabes que voy a ser abuela por primera vez el mes que viene.
Sea sincera, ¿qué piensa de los periodistas?
Pues mira, la verdad es que los periodistas que cubren la información local son como parte de la casa, del equipo… Están todos los días, te llaman por teléfono, hablas con ellos… Llega un momento que tienes una relación de cariño y creo que hacen un trabajo estupendo. Los periodistas bastante tenéis con el intrusismo profesional que hay en la profesión.
¿Cuál fue su primer sueldo?
El de maestra, creo que eran 78.000 pesetas. Recuerdo que después de las subidas que nos fueron haciendo, por cierto que fue un Gobierno socialista el que lo hizo, cuando llegué a las 100.000 pesetas, bueno… ¡Aquello era una barrera psicológica!
¿Alguna vez ha cobrado en B?
Nunca, soy funcionaria.
¿Tiene algún tatuaje o piercing?
No tengo ni tatuajes ni piercing. No me gustan, para mí no… Veo a las chicas jóvenes con esos pequeños detalles y sí me gustan, pero hay gente que… A veces es un poco excesivo o es al menos mi concepto estético. Pero yo no los tengo.
En caso de necesidad, ¿qué estaría dispuesto a hacer? Uno, robar para comer; dos, prostituirse para comer; o tres, engañar a Hacienda.
Pues mira, yo no cogería ninguna, me pondría a pedir en una esquina. ¿Si no me da nadie? No sé, pero es que de esas tres no me gusta ninguna. ¡Tengo clarísimo que no haría ninguna de ellas!
¿Le gusta bailar?
¡Mucho, mucho, me encanta bailar!
¿Con quién le gustaría echarse un bailecito?
Los bailes me los echo con mi marido, pero ya que me pongo… Con un guapo de mi generación, qué sé yo, con George Clooney, por ejemplo. ¡Ya que nos ponemos!
¿Pena de muerte sí o no?
No, nunca.
¿Ha robado alguna vez?
Pues no he robado nunca.
Y a usted, ¿la han robado?
Una vez me tiraron del bolso en Madrid. No se lo llevaron, iban en una moto, tiraron y no se lo llevaron. Luego, otra vez, perdí el bolso en Galicia y no me lo devolvieron nunca. Se me cayó del coche, no me di cuenta, y cuando llegué a Pontevedra me percaté… Volví sobre mis pasos y el bolso había desaparecido.
¿El famoso que más le atrae físicamente?
¡A mí es que siempre me ha gustado Paul Newman! Me parece el hombre 10, me parece guapísimo. Pero bueno, como ya no está… Últimamente hay chicos de estos que salen en las series de televisión que son guapetes, como Antonio Velázquez, quien interpreta a Gonzalo en «El final del camino».
¿Qué nos puede contar de la primera vez que hizo el amor?
Ja, ja, ja… ¡Pues te puedo contar de la última porque de la primera ya casi no me acuerdo! Ja, ja, ja… ¡Yo qué sé! ¡Que te voy a contar! Si es que no… Mira, ¡que ahora mismo nos sale mejor que al principio!