El consejero de Hacienda y Administraciones Públicas, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha comparecido en rueda de prensa para informar sobre la situación de emergencia por el temporal que está azotando a la región. 19.500 personas se encuentran sin suministro eléctrico en estos momentos en las localidades albaceteñas de Alcalá del Júcar, Alpera, Fuentealbilla y Minaya, y las conquenses de Casasimarro y Villanueva de la Jara. Estos problemas eléctricos se esperan resolver a lo largo de la jornada. Se mantiene el nivel 2 de emergencia.
Distribuidos por provincias son 13.400 en Albacete y 6.000 en Cuenca. El consejero de Hacienda y Administraciones Públicas ha dicho que “estamos colaborando con Iberdrola para solucionar lo más pronto posible los problemas del servicio eléctrico”.
Un total de 353 personas están ayudando en la región a superar las posibles emergencias. Ruiz Molina ha indicado que Castilla-La Mancha está desplegando todos los medios de los que dispone, que en este caso son 209 efectivos, 49 maquinas quitanieves, 6 camiones salero, 7 motoniveladoras, 3 retroescavadoras y 8.300 toneladas de sal.
El resto del personal que participa en esta situación de “crisis”, como ha indicado Ruiz Molina, son efectivos de la Unidad Militar de Emergencia (UME), un total de 144 personas, 14 todoterrenos, 6 camiones quitanieves y dos transportes de alta montaña.
Todas carreteras cerradas ayer por el temporal se han abierto y solo está restringida la circulación de vehículos pesados en algunas de ellas.
La UME está actuando en las localidades de Almansa, La Gineta y un último reten que se ha desplazado hacia la zona de Requna.
Se mantiene el nivel 2 de emergencias, pero se espera que el temporal vaya remitiendo.
Las clases en las provincias de Albacete y Cuenca estaban suspendidas, salvo en las capitales de provincia, donde a pesar de no haber actividad lectiva sí que están abiertas las instalaciones.
A nivel sanitario no ha habido que lamentar ninguna incidencia reseñable. Se han cancelado las citas sanitarias que no requieran de un tratamiento de urgencias y se han hecho las labores necesarias para que todos aquellos que no pueden prescindir del tratamiento diario, como los oncológicos y los de diálisis, puedan acudir con normalidad.