Arropadas con mantas para combatir la ola de frío siberiano y con cigarro en mano para despejar la mente “cada hora y media”, es el kit perfecto junto con “una regleta y los apuntes, claro”, para pasar la noche estudiando en la biblioteca de la UCLM. Encastillalamanca.es visita a los estudiantes universitarios que enfilan la recta final de su particular cuesta de enero y nos cuentan cómo combatir el insomnio y salir indemne de esta época de hincar codos.
Imagen de la Biblioteca de la UCLM en el edificio Madre de Dios Cobertizo de San Pedro Mártir.
«Te concentras mejor», «no nos llegan las horas del día», «en mi piso hay mucho ruido», «se me ha roto el flexo«. Muchas son las razones para acudir al horario after hours de las distintas Bibliotecas de la UCLM en Castilla-La Mancha y lo cierto es que, como indican los alumnos, este retiro espiritual en la biblioteca a altas horas ayuda, y mucho, a los estudiantes que pueblan sus salas durante estos días.
Un elevado número de universitarios decide aprovechar que hasta próximo día 26 se continuará con este horario hasta las 4 de la madrugada que, además, sirve como incentivo para aquellos inomnes que disfrutan de la tranquilidad de la noche para ultimar el fin de exámenes de la mejor manera posible.
Teresa, Nuria y Sonia, estudiantes de derecho, soportan la ola de frío siberiano ataviadas con mantas y despejándose fumando un cigarro en el patio de San Pedro Mártir.
Se animan al horario after hours por «la cantidad de exámenes» que tiene acumulados, pero sin duda poder estar «acompañadas de las amigas», y también, por la «falta de concentración por las mañanas», como reconoce Teresa, son otros de los alicientes de su presencia en esta sala.
Nuria, estudiante de tercero de derecho, cree que ir a la biblioteca hasta altas también sirve para «conocer gente» y para pasar un rato compartiendo penas y alegrías con las amigas.
Poder estar con los compañeros también es clave para Gonzalo, José Manuel e Ismail . El propio Ismail cuenta que la ventaja de estar con los compañeros es que «te puedes preguntar, comentar o explicar algo que no entiendes». Aunque Gonzalo tiene una razón de peso todavía mayor: «Se me ha roto en flexo en casa».
En el mar de tranquilidad de la noche, «no hay bullicio como durante el día», sino que la gente «viene a estudiar». Estos estudiantes de ADE y de Derecho explican que cuando empezó el horario nocturno la gente acudía a la biblioteca más «por el postureo».
José Manuel está convencido de que se «concentra mejor que en casa» y de este modo «echar más horas» que si estuviese en su casa.
Otros dos jóvenes estudiantes, 19 y 18 años, María Teresa Pérez y Gonzalo Torrijos, también estiran el día todo lo que pueden. Cuentan que llevan en la biblioteca desde las 10 de las mañana, y cuando el reloj marca la 1 de la madrugada todavía siguen estudiando porque «se acumulan muchos exámes». Explican que «haciendo descansos» cada cierto tiempo aguantan esta jornada porque, como asegura María Teresa, no les «alcanza las horas del día».
Estudian Fisioterapia y Bioquímica, y los extensos temarios hacen que estudiar de madrugada sea algo vital. Sobre todo si durante el cuatrimestre has estado un poco más relajado, como le ha pasado a Gonzalo… Y ahora hay que ponerse las pilas y tirar de la mezcla explosiva para aguatar despierto: «Café y redbull», porque cree Gonzalo que es la clave para poder mantenerse despierto y despejado en este arreón final de los universitarios de la UCLM.