El presidente de la Diputación de Toledo, Álvaro Gutiérrez, ha visitado el Mausoleo Paleocristiano de Las Vegas de San Antonio para conocer los trabajos de recuperación que se han realizado en estos importantes restos romanos y que han contado con el apoyo de la Administración provincial y de la Junta de Comunidades.
Álvaro Gutiérrez recorría el Mausoleo junto al alcalde, Roberto Bonilla, y el delegado de la Junta en Talavera de la Reina, David Gómez, tras las labores de limpieza, desbroce y desescombro realizadas como primera intervención del proyecto «Mausoleum», que ha promovido el Ayuntamiento de Las Vegas de San Antonio, pedanía de La Pueblanueva, y ha coordinado la Fundación Tagus.
Gutiérrez (quinto por la derecha), en las obras del Mausoleo.
Los arqueólogos responsables de la intervención, Sergio de la Llave y Ana Escobar, explicaron con detalle al presidente provincial las actuaciones realizadas en la cripta, en las sepulturas y en el resto del área incluida en el proyecto, destacando el valor de este mausoleo del que solo se conocen dos ejemplos de similares características en Europa, como son Santa Constanza en Roma y Split en Croacia.
Álvaro Gutiérrez valoró la importancia de la recuperación del mausoleo paleocristiano y compartió el interés del alcalde de Las Vegas de San Antonio por recuperar este patrimonio arqueológico tan singular y representativo del pasado y la historia de la comarca. Asimismo, resaltó las posibilidades de aprovechamiento social y cultural haciéndole visitable y el futuro desarrollo turístico que puede implicar para la zona.
En este sentido, el presidente de la Diputación comunicó al alcalde que este año también contará con el apoyo de la institución provincial para continuar los trabajos de recuperación y puesta en valor del mausoleo.
El Mausoleo representa un gran edificio monumental romano de época tardía en forma de panteón de enterramiento colectivo parental, tipológicamente encuadrable en la serie de grandes edificios sepulcrales centrales, excepcional para el ámbito del occidente del imperio (de influencia oriental y del Lacio), y que continúa como edificio durante la etapa visigoda e incluso islámica y cristiana bajo medieval.
Es uno de los escasos mausoleos de planta octogonal conocidos en el antiguo Imperio Romano, siendo único en Hispania. Quedan aún las cimentaciones de dos líneas concéntricas, los entalles de entrada, vanos y apoyos, así como una cripta en forma de segmento de octógono en la mitad central.