Son, en total, 11.000 kilos de ayuda humanitaria con destino a Siria, conseguidos en apenas tres meses y que forman parte de la campaña «Son mis hermanos» que Cáritas de Toledo puso en marcha tras la llamada de urgencia que realizó la madre Agnès de la Croix durante su visita a la capital regional en junio de 2016.
Por lo que un equipo de voluntarios, que ha estado coordinado por el delegado episcopal de Cáritas en Toledo, José María Cabrero, y por el secretario general de Cáritas, Javier García-Cabañas, se han movilizado para que en tres meses pueda ser realidad.
Pañales, leche en polvo, juguetes, algodón, artículos de primeros auxilios, material escolar, ropa de abrigo, zapatos, termos para bebés, resina para prótesis, sacos de dormir… Todo ello donado por empresas, instituciones y particulares.
Las 11 toneladas serán recibidas por la madre Agnès, con quienes están en permanente contacto, para garantizar que el envío llega a todas las personas que lo necesitan. Parte de estos artículos se compraron con la recaudación del concierto que se celebró en noviembre en el colegio Nuestra Señora de Infantes, concierto que ofreció la banda sinfónica Ciudad de Toledo.