El Museo del Greco se ha trasladado, por un día, al hospital Virgen de la Salud de Toledo y en especial a los niños y niñas que allí se encuentran. El objetivo es realizar talleres para acercarlos el Museo, «una manera cercana y emocionante de hacer de él una entidad viva y de colaborar en la plena inserción de colectivos con dificultad para participar en las actividades programadas».
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O, lo que es lo mismo, «expresar sentimientos y crear bienestar a través del arte», que es el objetivo principal que se proponen a la hora de preparar los talleres. «Arteterapia como medio para trascender miedos y curar».
Por eso esta mañana el tema propuesto ha sido «los colores del agua». ¿El agua tiene color? ¿Uno solo? ¿O no tiene? ¿Cómo podemos representarla? Diferentes posibilidades y matices que se esconden tras una gota de agua. Un taller que se llevará a cabo reutilizando materiales que les permiten observar y más tarde experimentar el tacto, el olor e incluso el sabor del agua.
Una aguja que no bucea, lapiceros de colores que atraviesan el agua y un torneo de pompas de jabón son algunos de los experimentos realizados.