El Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha ha convocado las subvenciones destinadas a mujeres víctimas de violencia de género que deseen cursar estudios universitarios dirigidos a la obtención de un título oficial de grado o máster en universidades públicas con implantación regional.
El Diario Oficial de Castilla-La Mancha publica hoy esta resolución en la que se establece que estas ayudas estarán destinadas a sufragar los gastos de la primera matrícula, destinando a esta convocatoria la cantidad máxima de 18.000 euros, 2.000 euros en el caso de cada beneficiaria.
El plazo para la presentación de las solicitudes comenzará a partir de mañana. Se podrán presentar de manera telemática con firma electrónica a través del formulario incluido en www.jccm.es o mediante su presentación en cualquiera de los registros de la administración regional.
Las beneficiarias deben cumplir los siguientes requisitos: estar empadronada en la región con una antigüedad, al menos, de un año; haberse matriculado en estudios universitarios conducentes a la obtención de títulos oficiales de grado o máster en universidades públicas con implantación en Castilla-La Mancha; y acreditar la condición de mujer víctima de violencia de género ya sea a través de una sentencia condenatoria, la certificación de la orden de protección o de medida cautelar o con un informe del órgano competente de la adminstración autonómica en el que se recoja la condición de víctima de violencia de género.
En esta resolución se pone de manifiesto que «el impulso de medidas encaminadas a posibilitar el acceso o la reincorporación de las mujeres al empleo, eliminar las discriminaciones por razón de sexo en el ámbito laboral y favorecer la formación tanto de las desempleadas como de mujeres ocupadas -promoviendo condiciones de libertad e igualdad- constituye una prioridad para el Gobierno regional».
La finalidad de estas subvenciones es la de ayudar a las mujeres víctimas de violencia de género a reincorporarse a la vida laboral mediante la realización de estudios universitarios que las ayuden a iniciar una vida libre e independiente.
De ahí que estas becas lleven el nombre de «Leonor Serrano Pablo», una de las pedagogas más innovadoras del primer tercio del siglo XX, que defendía una nueva pedagogía inspirada en el método Montessori. Además, como jurista y escritora feminista abogó por algo tan moderno como la conciliación entre la vida familiar y laboral.