Las voces del PP de Cuenca que se han opuesto a la acumulación de cargos de María Dolores de Cospedal han acogido la presentación de su candidatura a la Presidencia del PP regional con «alegría», siempre y cuando deje la secretaría general, y también con «preocupación» por el precedente que pueda sentar.
Así lo han afirmado en declaraciones a Efe tanto el concejal de Cuenca, Pedro García Hidalgo, como el alcalde de Cañaveruelas y secretario de Agua y Municipios Ribereños en el Comité Ejecutivo Provincial del PP de Cuenca, Gregorio Villamil.
García Hidalgo ha manifestado que se alegra de que «Cospedal decida optar a la reelección», si bien ha añadido: «Lo único que yo le pediría es que si finalmente es elegida, como todo apunta a que así va a ocurrir, pues que en ese momento renuncie a la Secretaría General nacional del PP».
Ha recordado que los Estatutos contemplan que «no se puede tener más de un cargo territorial de secretario general o presidente», y ha reconocido que él se «alegraría» de que Cospedal «se centre en Castilla-La Mancha, en ser presidenta del PP y en ser en el futuro la candidata del PP para recuperar el gobierno de la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha».
Por su parte, Gregorio Villamil ha reiterado que sigue pensando que «son demasiados cargos para una sola persona y que no pueden desarrollarse de forma adecuada», y ha mostrado su preocupación porque esto «pueda crear escuela en Toledo, y pase allí lo mismo; algo que ya está ocurriendo».
Villamil ha asegurado que considera a Cospedal una «excelente presidenta de Castilla-La Mancha», pero que él como alcalde de un pueblo quiere «un presidente cercano, al que se pueda recurrir y hablar con él, pero no alguien que tenga 40.000 cargos».
El alcalde de Cañaveruelas ha recordado que lleva 30 años afiliado al Partido Popular, y ha afirmado que no aspira «ya a nada», pero ha opinado que no puede ser que «haya gente con tal aglomeración de cargos en Toledo».
Villamil está convencido de que «por las noticias que llegan» va a haber una candidatura alternativa antes del 1 de marzo, y a su juicio debería haber «no sólo dos, sino tres o cuatro, y sería bueno para el partido».