¿Quién es el primero que se atreve a llevarle la contraria a Miguel Méndez-Cabeza Fuentes en algo relacionado con los ríos Tajo y Alberche? Porque hay que tener «corajines» para hacerlo, ¿eh? ¡De cabeza al río que te lleva!
Venga, va, fuera bromas (no lo tengo yo tan claro, no lo prueben por si acaso), este hombre es una verbigracia continua cuando habla de Talavera y de sus Antiguas Tierras. «Talaveranator» en su cuenta de Twitter, átense los machos, porque de casta le viene al galgo.
Fue uno de los fundadores, junto con su inseparable Miguel Ángel Sánchez, de la Plataforma en Defensa de los Ríos Tajo y Alberche que logró reunir en la ciudad de la cerámica el 20 de junio de 2010 a miles de personas, partidos políticos incluidos, mire usted por dónde, que reclamaron justicia por el agua de un río que se está esquilmando desde hace décadas.
Y ahí siguen, en la lucha. Porque «talaveranator», con sus 55 añazos a cuesta, aún tiene cuerda para rato. ¿Dónde nació usted, por cierto? «Yo soy talaverano, por supuesto. Nacido y militante». Sí, sí… A ver si alguien tiene arrestos para llevarle la contraria. Porque como se ponga «brutote»…
Buen tipo Méndez. Siempre con la historia, la naturaleza y el patrimonio de su Talavera en la cabeza; autor y coautor de 15 libros, el último titulado «115 excursiones desde Talavera», que él ha hecho una a una, claro. Casado y con dos hijos, seguirá hasta el final de sus días luchando por lo que entiende que es su razón de ser: su ciudad, su río, sus tierras, su gente…
¡Por eso su hijo le puso el sobrenombre de Talaveranator!
¡Ele!
Usted es “talaveranator” en su cuenta de Twitter… ¡Joder, dicho así da miedo!
Tiene una explicación sencilla. Y es que como uno es un poco megatorpe en esto de las nuevas tecnologías pues le dije a mi hijo que me abriera la cuenta. Me dice: ¿Cómo te pongo? Pues hombre, pon algo de Talavera, ya sabes que yo con lo talaverano… Y fue él el que dijo: ¡Pues talaveranator! (léase talaveraneitor). Pero vamos, no se aleja mucho de la realidad.
Pero “talaveranator” sin “golindelasenda”, que es su amigo y cofundador de la Plataforma para la Defensa de los Ríos Tajo y Alberche, Miguel Ángel Sánchez, sería solo “terminator”…
Ja, ja, ja… Hombre, eso en cuanto al río. Hay veces que parece que solo es eso lo que hacemos por esta tierra, pero por supuesto que estoy muy orgulloso de estar con mi amigo “golindelasenda” trabajando también por Talavera. Es un gran conocedor del tema hidrológico, pero a nivel nacional, ¿eh?
¿No me diga que usted no es un auténtico cabezón?
Sí, sí… Como dice Cela, cabezón físico y también en cuanto a que si me pongo un objetivo pues intento conseguirlo. Cito una de sus frases: «El que resiste, gana».
¿De perdidos al río…?
Noooo… De perdidos a intentar buscar el camino fluvial. Ja, ja, ja…
¿Qué le debe a usted el Tajo?
Le debo yo más al Tajo, y los talaveranos, de ratos de felicidad, de bien cultural que identifica a la ciudad que lo que el Tajo nos pueda deber a nosotros. Y yo soy uno más de ellos.
¿Quién se lo ha cargado?
Muchas cosas. La indolencia de los propios talaveranos y, sobre todo, la connivencia de los políticos locales y regionales en algo que para mí es el mayor disparate medioambiental que se ha hecho en este siglo en España y que seguimos soportando en Talavera. Talavera es la ciudad perdedora de la política hidrológica nacional, la gran pringada. El Alberche se lo lleva Madrid, el Tajo se lo lleva el trasvase… Nos quieren secar por arriba, por abajo, por delante y por detrás. No conozco otra comarca de España que esté en esta situación.
Doctor, doctor… ¿Tiene cura el río?
El Tajo tiene cura y se van consiguiendo cosas. Conseguimos organizar una manifestación en la que había decenas de miles de personas siendo una zona muy desmovilizada y demás. Fue algo histórico, la mayor manifestación que ha existido en Castilla-La Mancha.
Entonces… ¿Para qué sirvió la manifestación del 20-J?
Para que contemos. Antes se nos despreciaba olímpicamente como comarca. Por ponerte un ejemplo pintoresco: en la lista que hizo la Confederación Hidrográfica de los problemas importantes de la cuenca del Tajo no estaba que el Tajo se secara en Talavera. Ya sí. Hemos conseguido unir a toda la cuenca desde Talavera.
¿Es lo que vulgarmente podríamos conocer como un “tocapelotas”?
Algunos me lo han dicho. Ja, ja, ja… Que parece que me caí en la marmita de tocapelotas de Obélix. No, simplemente lo que soy es un ciudadano talaverano que le gusta reivindicar lo que es suyo y lo que culturalmente nos corresponde a esta ciudad.
A ver cómo es esto: ¿Toledo la gran beneficiada, Talavera la gran perjudicada? O…
Toledo ha sido una gran beneficiada, evidentemente. Solo hay que mirar en cualquier aspecto: circunvalaciones, en Toledo son los anillos de Saturno mientras aquí tenemos una que está sin acabar con ese puente inutilizado… Las carreras universitarias… Te podía hacer una enumeración… Y yo me alegro de todo lo bueno que le pase a Toledo, por supuesto, pero es de justicia que las ciudades que no son capitales de provincia también tengan sus derechos. Y sobre todo que sus ciudadanos tengan los mismos derechos que los ciudadanos de las capitales de provincia.
Fíjese que no me creo que ningún partido político no le haya tirado los tejos en alguna ocasión…
Pues tienes razón. Ja, ja, ja… He podido meterme en política pero no he querido. Me gusta más ser un ciudadano. De los dos… Incluso de alguno pequeño más. De varios partidos, pero no quiero entrar, quiero salvaguardar, por encima de todo, mi independencia.
Pero…
Es que los partidos políticos en España tienen una disciplina castradora y sería muy difícil que no saliéramos tarifando.
¿Le gustaría ser alcalde de Talavera algún día?
Ehhhhh… Mira, eso… No sé, por una parte te voy a decir… Me gustaría trabajar por Talavera, incluso estar sugiriendo cosas que se podrían hacer, pero creo que como alcalde iba a ser terrible porque me iba a estar llevando muy mal con mi partido. Creo que no, porque a los tres días me habrían echado del partido con el que hubiera sido elegido.
¿Médico de pueblo o médico de ciudad?
Yo de pueblo. Siempre quise ser médico rural. La de antes era una medicina más humanizada que ahora, había respeto por las dos partes. Ahora hay una situación más fría en la relación.
¿Algun anécdota que haya vivido como médico de pueblo?
Te voy a contar una: en mi primera consulta en un pueblecito de La Jara me entró una señora y me dijo que tenía arrebatos karmas y se le llenaba el cuerpo de verdugones. Una definición perfecta de un síndrome menopáusico, pero dicho con otras palabras. Menos mal que uno es de la tierra y sabía más o menos por dónde iba la cosa. Ja, ja, ja… ¡Pero tengo infinidad de anécdotas!
¿Por qué cambió de sindicato? El histórico dirigente del CSI-F de repente ya no está…
Bueno, simplemente… ¡No te voy a responder a eso!
Oiga, una pregunta de la calle: ¿Los sindicalistas también trabajan?
Sí. Y creo que es muy injusto y muy reaccionario el ataque sistemático que se hace a los sindicalistas y también a los liberados sindicales. Por supuesto que los sindicatos tienen muchísimos defectos, por supuesto que hay delegados sindicales que se merecen muchísimas críticas, todo lo que tú quieras, pero los sindicatos están puestos para defender a los trabajadores y son absolutamente necesarios en un sistema democrático. Y todo lo que sea intentar laminarlos y destruirlos o que desaparezcan va contra el propio espíritu de la democracia.
¿Está de acuerdo con la pena de muerte?
No, en ningún caso. Aunque a veces hay determinados delitos en los que te pide el cuerpo… ¡No, no estoy de acuerdo! Ahora, con el cumplimento de las penas pues a lo mejor… Con que algún recluso esté segando de sol a sol con un gazpacho pues a lo mejor sí, pero con la pena de muerte no.
¿Milita en alguna ONG, asociación…?
En la Plataforma y en cualquier cosa que sea para el estudio de nuestra tierra. En el colectivo La Enramá también.
¿Cuándo comenzó usted con los movimientos reivindicativos?
Bueno, yo con 15 años monté una especie de sublevación en los Maristas, cuando todavía vivía Franco, y me expulsaron por un día. Ja, ja, ja… Había un malestar creciente en la clase y un día nos quitaron las mesas a tres o cuatro y nos dijeron que teníamos que pagar algo del material. Eso fue la gota que colmó el vaso. Me dio por poner los recibos en un marco rococó y colgarlos de la canasta de baloncesto con un cartelito alusivo. Parece que a los curas, con los que luego he mantenido una buena relación, les sentó mal y ya entonces… Aun siendo de los primeros de la clase me expulsaron. Pero luego me tuvieron que readmitir porque yo tenía razón.
Sin trabajo ni prestación, ¿qué estaría dispuesto a hacer para comer?
Algo en lo que no tuviera muchos jefes por encima y que fuera en contacto con la naturaleza. A lo mejor me cogía unas cabras y me iba a Gredos, a la Jara alta. No estaría mal, de pastor, que siempre es una persona independiente, está a su aire… Ja, ja, ja…
¿Prohibiría la prostitución?
No, en ningún caso. Yo he visto fichas de prostitutas de la época de Franco en el centro de higiene de Talavera. Vi unos ficheros donde las prostitutas tenían su cartilla, se les hacía analíticas… Por supuesto que no. Mira, prohibir la prostitución y prohibir los toros es una constante en la historia de España que a nadie le ha resultado. Los toros no es que me gusten mucho, pero considero que forman parte del alma ibérica.
No ve maltrato en los toros…
No, yo considero que no. Me gusta la antropología y los toros tienen ahí detrás mucha alma y mucha estética. Considero que hay muchos más animales que viven peor.
¿Cuál fue su primer sueldo y en qué se lo gastó?
35.000 pesetas de sargento de infantería en Toledo. Ja, ja, ja… Y me las gasté, como todo buen militar, en comer y sobre todo en beber.
¿Qué personaje histórico le gustaría ser?
Algún personaje histórico anónimo. Por ejemplo, un vetón en la Talavera prerromana, un cuadrillero de la Santa Hermandad Real y Vieja de Talavera, un pastor trashumante que pasa por la cañada leonesa en el siglo XVI o vivir en el siglo XV con algunos de aquellos hombres cultos de la clase dirigente, como el marqués de Santillana, don Álvaro de Luna… Me gustaría tener una máquina del tiempo para poder ir a aquellas épocas, más que ser…
¿Con qué duerme? Si duerme con algo, claro.
Yo normalmente duermo, como dicen por aquí en los pueblos, “to pelete”. Ja, ja, ja… A veces, si hace mucho frío, me pongo una ajada camiseta de la Caja Rural pero… ¡Solo en días muy fríos!
¿Qué libro está leyendo?
Suelo leer varios libros al mismo tiempo. Ahora estoy con “La crónica del halconero”, de Juan II; con “Ausencia del héroe”, de Bukowsky; con uno muy curioso de Julio Verne que encontré en Cádiz y se llama “El ácrata magallánico”; y también leo todos los días un canto de “La Ilíada”, que antes lo hice con “La Odisea”. Y acabo de leer otro libro que recomiendo, “Carne de gato”.
¿En qué película le hubiera gustado actuar?
Como buen talaverano, solo en algunas de las dos películas de cierta categoría que se han rodado en Talavera: una de ellas es “Un alto en el camino”, en la que intervino Lola Flores; y otra que fue premiada en Cannes, de Mario Camus, “Con viento solano”, sobre una preciosa novela de Ignacio Aldecoa. O en aquellas películas en las que hay supervivencia del hombre en la naturaleza. Películas que me marcaron mucho fueron «Dersu Uzala», «En busca del fuego» o «Entre lobos».
Cuando va al fútbol, ¿insulta al árbitro o a los rivales?
No… En mi familia hay un gen que nos falta, el del deporte. El fútbol o el deporte es como si veo llover. Es más, me gusta más ver llover que el fútbol. Aunque sí practico el montañismo o el senderismo. De hecho, entre varios amigos fundamos el grupo Capra hace ya… Yo fui el primer presidente.
¿Su mayor travesura?
Para mí la vida es una travesura diaria.
¿Qué programas del corazón ve?
¡Ninguno, me parecen un coñazo total, absoluto!
¿Cuál es la mayor multa que le han puesto y por qué?
Una por no pasar la ITV. Fue poca cosa, vamos.
Defínase: ¿de derechas, de izquierdas o de centro?
No sé lo que soy, yo solo sé que no sé nada. Hay cosas de la derecha que no me gustan, hay cosas de la izquierda que no me gustan, lo del centro no es ni chicha ni limoná… Pero yo me considero, sobre todo, un ciudadano. Ayer leí que ha salido un partido en Italia y que se llama “A cinco estrellas” y que instituyó el día de “iros a tomar por…”. Ja, ja, ja… En España se necesita una segunda Transición.
¿A quién votó en las últimas elecciones?
A nadie porque hace 30 años que no voto.
¿Cree que el tamaño importa?
Ehhh… ¡Hombre el tamaño, no sé…! El tamaño quizás ayude en algunos casos pero… Ja, ja, ja… ¡No creo que sea determinante!
¿El juego del parchís es cosa de hombres? Se lo digo porque ya sabe aquello de que se comen una y cuentan 20…
Bueno, hay mucho fantoche por ahí, pero se los ve rápidamente.
¿Se atreve a decir el lugar más raro donde ha practicado sexo?
Pues sí, te lo voy a decir. Yo soy, como dice mi amigo Ángel Monterrubio, muy virgiliano. Me gustan los escenarios naturales, soy mucho del marqués de Santillana, de Gonzalo de Berceo… Ese lugar ameno de la pradera… ¡Te lo voy a decir! En cierta ocasión, la primera vez que dormí en una cama con la que luego sería mi mujer fue en un pueblo de la estepa de Albacete donde por los fríos y las heladas hubimos de parar en cierta ocasión. No sé si era con 18 ó 19 años y fuimos a pedir alojamiento en una casa del pueblo que alquilaban habitaciones. ¡Y para ser la primera vez nos pusieron en una habitación llena de santos, vírgenes y cristos sangrantes que, la verdad, por lo fogoso de la juventud, que si no hubiera sido difícil tener la concentración necesaria para ello! En una cama altísima… Ja, ja, ja…
¿En qué pueblo fue?
En El Bonillo. Ja, ja, ja…
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