El Gobierno regional ha recurrido el auto del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha (TSJCM) que suspende el decreto que ampliaba la Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) de la Laguna de El Hito e impedía la construcción del ATC de residuos nucleares de Villar de Cañas (Cuenca).
El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rura ha indicado en la Cadena SER: «Hoy mismo el Gobierno regional recurre el auto que decreta la suspensión cautelar de la protección de ese espacio natural«.
Francisco Martínez Arroyo ha justificado la presentación del recurso porque el Gobierno castellanomanchego porque entiende «que esa suspensión cautelar pone en riesgo la decisión sobre el fondo de la cuestión, que está pendiente de sentencia, que es sobre si el espacio debe estar o no protegido».
«Los poderes públicos deben proteger el medio ambiente»
En este sentido, ha añadido: «Respetamos el auto pero no lo compartimos, creemos que antes de las cuestiones nucleares están las prioridades ambientales, los poderes públicos tenemos la obligación de proteger el medio ambiente, lo dice el artículo 45 de la Constitución».
A Martínez Arroyo no le parece «razonable» suspender cautelarmente la aplicación de la protección ambiental sobre un espacio, sino que opina que «la cautela debería ser por la protección del espacio».
Y ha reiterado: «El medio ambiente, desde nuestra perspectiva, está muy por delante en prioridad de la política nuclear».
Por otra parte, ha informado que el Gobierno regional ha enviado un informe a la empresa Enresa, sobre la zona donde se quiere construir el ATC, en el que se pone de manifiesto «que en la zona no se puede, desde el punto de vista del medio ambiente, construir un basurero nuclear, con independencia de que esté dentro de una zona ZEPA o no».
El informe ha sido elaborado por Dirección General de Espacios Naturales y Política Forestal de Castilla-La Mancha a solicitud de la propia Enresa.
En el informe se indica que el proyecto tiene muchas deficiencias en relación la protección del espacio natural, «porque el planteamiento de Enresa no tiene en cuenta cuestiones que no tienen que ver con que el terreno esté en una zona ZEPA».
Entre estas cuestiones figuran que no se recojan los riesgos geológicos y radiológicos sobre el territorio, los impactos sobre el régimen hidrológico del río Záncara o que el Plan de Ordenación Municipal (POM) de Villar de Cañas en estos momentos está anulado.
Martínez Arroyo ha afirmado: «Parece increíble que a estas alturas todavía se quiera seguir construyendo en Villar de Cañas este basurero nuclear, sin cumplir ni siquiera los mínimos desde el punto de vista ambiental e incluso urbanístico, lo cual nada tiene que ver con que el espacio esté más o menos protegido».