Las organizaciones empresariales han sido siempre, además de prestatarias de servicios, un confesionario para los empresarios. Hoy, ese confesionario recibe cada vez más testimonios y más duros. Lo sabe bien Félix Peinado, secretario general de Cecam, que lo cuenta en las próximas líneas y con más detalle en la entrevista íntegra que publicamos en encastillalamancha.es. ¿Cómo está el empresario?, le preguntamos. La respuesta deja helada a quien la escucha: «Desfondado, ha tocado fondo psicológico y de resitencia». Hasta el punto de que muchos se arrepienten de seguir adelante o de no haber cerrado antes y haber perdido menos en vez de perderlo todo. Pone los pelos de punta escuchar lo que está crisis está haciendo con la moral y las ganas de nuestros empresarios.
Con este panorama, dado que en Castilla-La Mancha vamos peor y durante más tiempo, ¿cuál es el mejor consejo que se le puede dar a un empresario, que cierre y se vaya a otro sitio?
El pequeño empresario de Castilla-La Mancha está en este momento desfondado. Hay un pesimismo instalado en la sociedad y en el empresario, que yo creo que por su propia idiosincrasia ha sido el más optimista todos estos años. Pero yo creo que hemos llegado a un punto que hemos tocado fondo a nivel psicológico y de resistencia de las personas que están al frente de las empresas. Necesitamos una dosis de optimismo y de ver que somos capaces de sacar esto. Yo estoy convencido de que podemos salir de esta situación, somos las mismas personas que en 2006 o 2007, con mejor tecnología, posibilidad de participar en un mercado global mucho más grande, tenemos buen producto en general… Solo nos diferencia la falta de liquidez, en el momento en que se restituya ese tema podremos volver a recuperar la actividad.
«LO MÁS DURO QUE LE PUEDES ESCUCHAR A UN EMPRESARIO ES QUE SE ARREPIENTE DE SEGUIR COMO EMPRESA»
¿Qué piden hoy los empresarios a sus organizaciones?
Lo más duro que le puedes escuchar a un empresario es decir cosas como que si hubiese cerrado hace años a lo mejor no estaba en la situación en la que se encuentra y arrepentirse de seguir funcionando como empresa. Lo que más nos están pidiendo es apoyo en el conocimiento del nuevo entorno, de la reforma laboral, de las reformas fiscales y, sobre todo, lo que es un clamor es la financiación.
¿Los bancos están haciendo todo lo posible?
Los bancos, como cualquier entidad privada, están haciendo todo lo posible por resolver sus problemas. Otra cosa es que tangencialmente en la medida en que se resuelvan sus problemas también se resuelvan los nuestros.
«LOS BANCOS GANAN MÁS DINERO Y CON MENOS RIESGO PRESTANDO A LA ADMINISTRACIÓN»
¿Pero los bancos no están para prestar dinero y por eso les ayudamos?
Los bancos son empresas y como tal están para ganar dinero. Y lo hacen prestando dinero, pero si ganan más dinero hoy, con mucho menos riesgo, prestando dinero a la administración que prestándoselo a un empresario, pues es lo que están haciendo.
Los planes de ajuste tan duros que se han puesto en marcha en Castilla-La Mancha, en una economía tan dependiente de la actividad pública, ¿son la solución o son parte del problema de la recesión?
Son necesarios y como tal son parte de la solución. Lógicamente tienen unos efectos y a corto plazo suponen desaceleración y sufrimiento económico. Pero de eso tiene que salir una economía más sana, más competitiva, más basada en la tecnología, en el conocimiento y la internacionalización. Por eso digo que si tuviéramos algún tipo de medida para contener un poco ese sufrimiento, sería muy importante para que este proceso no fuera tan duro.
«AL ESTADO LE CORRESPONDE UN PAPEL DE GARANTE DE LO QUE HACEN LAS COMUNIDADES AUTÓNOMAS Y SER MÁS PROACTIVO»
¿Algún tipo de medida podría ser que el Estado relajase el cumplimiento del déficit o ayudase a él en comunidades como ésta, que están en situación extrema?
Lo que no tenía que haber pasado es lo que ha pasado, no teníamos que haber llegado a la situación de déficit a la que hemos llegado y a este despilfarro que ha sido el sector público en su conjunto. Lo que debería haber son medidas valientes y decididas en la reestructuración del sector público y más en el ámbito nacional que en el de las comunidades autónomas. Al Estado le corresponde un papel de garante de lo que están haciendo las comunidades autónomas y tiene que ser mucho más proactivo, no se puede decir éste es el objetivo que tenéis que cumplir y hacerlo como podáis, pero si no lo cumplís, que sepáis que estáis intervenidos a partir de mañana. Hay que ser más decidido y ayudar mediante acuerdos a nivel nacional, como se ha hecho con la reducción del gasto farmacéutico.
«HAY QUE EXPLICAR LO QUE HA PASADO, PERO YA TENEMOS QUE ESTAR DANDO PASOS Y NO SOLO MIRAR AL PASADO»
¿Qué pensó cuando vio las naves de regalos que nos enseñó hace unos días el consejero de Presidencia? ¿La foto del despilfarro o una cortina de humo?
Pensé que hay que hacer un poco de las dos cosas. Hay que explicar a los ciudadanos lo que ha pasado, que es muy importante que comprendan de dónde venimos para saber porqué se están tomando las medidas que se están tomando. Cuando al ciudadano se le piden sacrificios es muy importante saber porqué. Pero, por otro lado, creo que ya tenemos que estar dando pasos y no solo mirar al pasado sino también al futuro. Hay que empezar a sembrar ya para empezar a recoger. Esas son las dos cosas que me vienen a la mente cuando veo eso.
¿Quiere decir que a los empresarios de Castilla-La Mancha no les aporta ya nada el discurso de la herencia recibida y echan de menos más soluciones prácticas?
No nos aporta nada, los empresarios siempre somos de mirar a las cuentas de hoy y lo que va a pasar mañana. Lo que pasó ayer solo nos tiene que servir para aprender y no volver a caer en los mismos errores.