El Pleno del Ayuntamiento de Toledo aprobó con los votos a favor del PSOE, la abstención del PP y los votos en contra de IU la operación de crédito a largo plazo con cargo al mecanismo extraordinario de financiación para el pago a proveedores previsto en el Real Decreto-Ley 4/2012 de 24 de febrero. El Ayuntamiento, se ha acogido a esta norma por imperativo legal si bien, la concejal de Hacienda recuerda que no hubiera sido necesario si la Junta y la Diputación pagaran lo que adeudan y si las arcas municipales no «tuvieran el agujero» del Palacio de Congresos.
La aprobación de este crédito, por importe de 29.172.264,13 euros y con un plazo de amortización de 10 años con dos de carencia, forma parte del procedimiento exigido por el Gobierno de España para los ayuntamientos cuyos Planes de Ajuste han sido aprobados por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas.
El Real Decreto fija que la aprobación de esta operación crediticia es de obligado cumplimiento antes del 15 de mayo y tiene como objetivo el pago a proveedores del Ayuntamiento, Empresa Municipal de la Vivienda y Patronato Deportivo Municipal. No obstante, la concejal de Hacienda y Economía, Paloma Heredero, señaló en su intervención que Toledo no hubiera tenido que acogerse a dicha norma del gobierno de España si la ciudad no arrastrara la deuda del Palacio de Congresos (10.500.465 euros) y si la Junta de Comunidades y la Diputación de Toledo pagaran al Ayuntamiento los casi 14 millones que deben a la administración local.
Paloma Heredero señaló que todas estas circunstancias obligan a la ciudad a pagar por intereses 5,3 millones de euros cuando tan solo hubiera sido necesario desembolsar un millón de euros.