Nada más intercambiar unas palabras con ellos se comprueba por qué protagonizan uno de los espacios de la radio más divertidos. Ellos son Sergio Fernández y Arturo González-Campos, presentadores del programa «La parroquia del monaguillo» que se emite en Onda Cero de lunes a viernes de una a cuatro de la madrugada, una franja horaria en la que, tal y como explicaba Sergio Fernández -más conocido como «el monaguillo»- la gente no solo quiere escuchar historias tristes sino también divertirse.
Recientemente estuvieron de visita en Toledo para, de la mano del fotógrafo toledano Pepe Castro y en el Hotel AC, preparar la fotografía que irá en la portada de su nuevo libro «Vamos a la cama», un libro como ellos mismos dicen de «sexualismo», «el primero de sexualismo que pueda leer toda la familia», puntualizan, y «el primer libro sobre sexo hecho por gente que no entiende de sexo».
Después de «Las fábulas del monaguillo», «Tonto el que lo lea» o «¿Para qué sirve un cuñao?», ahora esperan cosechar con «Vamos a la cama» el mismo éxito que con los anteriores. En ellos han contado con la colaboración de Espasa, encargada de la edición, y del actor y también dibujante Agustín Jiménez.
Por primera vez se ponen serios ante la pregunta de cuál es el balance que hacen de estos cuatro años con «La parroquia del monaguillo». Aseguran que ha sido «espectacular» porque surgieron en una etapa en la que a esas horas solo había programas en los que la gente llamaba para contar sus problemas, todo lo contrario a lo que ellos pretendían: divertir a la gente. Se han hecho con numerosos «parroquianos» con los que el contacto es fluido a través de las redes sociales, seguidores de todas las edades e incluso jóvenes «que no escucharían la radio convencional si no fuese por La parroquia del monaguillo». «También son muchos los que a esas horas no nos pueden escuchar y se descargan los podcasts». Ven que la fórmula funciona no solo por lo que reciben de su público sino también por las críticas de otros profesionales del humor, lo cual para ellos es una gran recompensa. De hecho, en «Vamos a la cama» cuentan con tres prologuistas de excepción: Javier Cansado, «una referencia del humor y un gran fan del programa»; David Rovira, quien representa el nuevo humor; y Flo, «toda una institución».
Han hecho de todo: teatro, monólogos (Sergio Fernández llegó a ser finalista del tercer certamen de monólogos del «Club de la Comedia»), guiones, libros… Todo siempre con el humor como telón de fondo. Insisten en que «no hemos parado» y «siempre con el humor» porque «no nos saldría hacer, por ejemplo, ‘Cinco horas con Mario’; no nos sale otra cosa». Para los espectadores toledanos recuerdan que estarán en «Manicómico», en Madrid, un viernes de cada mes. La próxima cita será el 23 de junio.
Y como su apodo no pasa desapercibido, es obligado preguntarle a Sergio el por qué de «El Monaguillo», ante lo cual Arturo siempre protesta: «¿Y por qué a mí no me preguntan por qué me llamo Arturo?». Dice Sergio que «ojalá pudiera inventar una historia increíble para explicar el mote» pero lo cierto es que viene de cuando comenzó en la radio de muy joven y al presentador del programa «al que iba a molestar se le ocurrió que yo iba a ser el monaguillo».