La Asociación de Promotores Inmobiliarios de Toledo, Aprointo, ha hecho un llamamiento a los propietarios de Talavera de la Reina para presentar alegaciones conjuntas contra la nueva ponencia de valores catastrales cuya revisión repercutirá negativamente en el IBI.
En rueda de prensa en Talavera, el presidente de Aprointo, Aurelio Vázquez, ha dicho que en la ciudad se han revisado 71.000 bienes, aunque los más afectados son los titulares de terrenos que fueron recalificados de rústicos a urbanizables con la entrada en vigor del nuevo Plan de Ordenación Municipal.
Aprointo demanda «sentido común» y reclama que los valores de la nueva revisión catastral se ajusten «al uso real» del bien inmueble y «al precio real» que actualmente tienen en el mercado, para que «un campo de patatas» siga pagando como tal ya que no será viable que sea una urbanización de pisos en muchos años, explica.
Según Vázquez, los promotores llevan varios años sin construir obra nueva y se encuentran con que en breve deberán pagar nuevos recibos por suelo urbanizable, fruto de un POM «insostenible» que ha recalificado terreno para levantar más de 54.000 viviendas, que según calculan, no se construirán ni en 180 años.
Aprointo ha organizado una jornada técnica dirigida a promotores inmobiliarios y a propietarios en general, a cargo de una consultora catastral, que tendrá lugar mañana, en la que plantearán medidas son oportunas adoptar en defensa de sus intereses.
Vázquez habla de «catastrazo» y asegura que los afectados sienten «indefensión» ante una revisión de valores que «aporta más dificultades para que familias y empresas puedan sostenerse», por lo que piden unión porque «hay que actuar ahora».
Aprointo opina que el actual POM de Talavera, en vigor desde marzo de 2011, nació «excesivo» así como «inviable e inapropiado», con previsiones cinco o seis veces por encima de la necesidad real, y recuerda que en la ciudad aún podrían levantarse 11.800 viviendas en suelo no desarrollado del anterior plan general de ordenación urbana.
El equipo de Gobierno de Talavera ha querido tranquilizar a los afectados anunciando que aplicará bonificaciones para que el incremento del recibo del IBI no sea desproporcionado, pero Aprointo defiende un cambio en la ponencia de valores, para que el pago anual no dependa de la «buena voluntad» o la necesidad económica del Ayuntamiento.