El 29 de mayo, a tan solo tres días del inicio de la campaña de alto riesgo de incendios forestales, la empresa pública Geacam comunicó a los representantes de los trabajadores la modificación de la encomienda de gestión que la Conserjería de Agricultura quiere hacer al dispositivo de extinción de incendios forestales de Castilla-La Mancha.
Esta modificación debería haber sido objeto de negociación colectiva ya que afecta de forma colectiva y sustancial las condiciones de trabajo de dos categorías profesionales, las de Vigilante Forestal Móvil y la de Ayudante de Vigilante Forestal Móvil, que integran en total a unas 350 personas.
Según CC.OO., lo que pretende la empresa es cambiar la categoría profesional de estos trabajadores, de forma que puedan ejercer cualquier función y en cualquier retén o retenes de las diferentes unidades de cada provincia; con el perjuicio que tal modificación supone para unos trabajadores que, después de percibir salarios pequeños, nos vemos obligados a deslazarnos, instalarnos y pagarnos de nuestro bolsillo una pensión o alquiler de vivienda si es que queremos trabajar en el dispositivo.
En opinión del sindicato, el fin de este proceso es evitar tener que contratar a los 350 interinos que venían prestando servicios en nuestro dispositivo desde hace ocho y hasta nueve años en algunos casos.
Es por ello que esta medida va a tener dos tipos de efectos: laborales y sobre los montes de Castilla-La Mancha.
Desde CC.OO. afirman que los efectos laborales van a ser muy directos y violentos sobre los 350 interinos que echan a la calle; y también efectos laborales muy graves sobre los trabajadores del dispositivo, a los que se les obliga a trabajar en localidades con la merma económica; además de sobrecargar de trabajo a todo el dispositivo regional, que se ve mermado en un 20 por 100 sobre el operativo que teníamos el año pasado.
«Y efectos muy graves sobre los montes de nuestra región ya que eliminan unas unidades, como las patrulla móviles, que son las encargadas de la vigilancia directa y de intervención primera e inmediata en tareas de extinción. Son las unidades más rápidas que tenemos dentro de nuestro dispositivo, cuya intervención es clave para que muchos los incendios se queden en conatos y evitar así que se extiendan y agraven», advierte CC.OO. en nota de prensa.
«Los trabajadores de dispositivo de extinción de incendios de Castilla-La Mancha queremos trabajar de forma segura y vivir de nuestro trabajo. Trabajamos en las zonas más deprimidas de nuestra región, en los pueblos más escondidos de nuestras serranías, es la tarea que nos corresponden para cumplir la responsabilidad colectiva de vigilar y proteger nuestro medio natural para las generaciones futuras»
Deade CC.OO. puntalizan que lo que quieren es que «no nos cueste la vida nuestro trabajo. Menos medallas y más pan, mejores salarios y trabajo en condiciones dignas y seguras».