La Fundación da a conocer sus aceites a los representantes de un grupo de empresas asiáticas de cátering y restauración, que visitan Toledo esta semana para entablar relaciones comerciales.
Una delegación de China y Hong Kong, integrada por 18 compañías, asistirá mañana, jueves 14 de junio, a la presentación y posterior cata de los aceites de oliva de siete empresas asociadas a la Fundación Consejo Regulador de la Denominación de Origen de Aceite Montes de Toledo. Los empresarios asiáticos, pertenecientes a la Guangdong Restaurant Association y a la International Catering Association, realizan un viaje de prospección a la región en busca de productos de calidad, con potencialidad para introducirse en el mercado chino. El evento forma parte de una misión comercial organizada por el Instituto de Promoción Exterior de Castilla La Mancha (IPEX).
El acto, organizado por la D.O. en colaboración con el IPEX, consta de un seminario titulado Montes de Toledo´s tasting session, a cargo de Enrique García Tenorio, director de Certificación de la fundación. Tras dicho seminario tendrá lugar la presentación y cata de varios aceites de oliva, producidos bajo el amparo de la Denominación de Origen Montes de Toledo por las siguientes empresas: Aceites Toledo, Mora Industrial, Aceites Malagón, Cooperativa San Sebastián de El Romeral, Explotaciones Agropecuarias La Moncloa, La Labranza Toledana y Agroexplotaciones Tocuman. El encuentro tendrá lugar en la Escuela de Administración Regional.
La Denominación de Origen Montes de Toledo es una fundación sin ánimo de lucro, de las más antiguas de España y la primera en otorgar certificaciones bajo la acreditación de ENAC a los aceites que se dan en esta zona de producción. Agrupa aceites de oliva muy valorados por los expertos aceiteros por su calidad, debida a las condiciones de clima y suelo, que hacen propicio el cultivo del olivo y al uso de la variedad Cornicabra, autóctona de la zona. Su consejo regulador aglutina a más de 40 empresas productoras y envasadoras de aceite y cuatro mil olivareros, en su mayoría con producciones relativamente bajas, lo que permite cuidar al máximo el fruto y el proceso de elaboración. Esto redunda en su alta calidad, por otra parte muy homogénea en toda la producción.