En total son 92 ex consejeros o ex directores generales de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha quienes, tras dejar la política y en el momento de regresar a sus puestos de funcionarios, cobran un complemento en algunos casos de 500 euros, en otros de 600 e incluso los hay de hasta 800 euros al mes, tal y como ha confirmado el consejero de Presidencia y Administraciones Públicas y Portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Leandro Esteban, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno.
Por lo que, según ha recalcado, el PP presentará una enmienda parcial al proyecto de ley de presupuestos con el objetivo de eliminar este complemento, que supone un gasto anual de 500.000 euros al año para las arcas de la comunidad autónoma. Esteban entiende que no tiene por qué haber discriminación entre funcionarios, «es un privilegio que no tiene ningún sentido, y más aquellos que han dejado la región metida en la ruina y en el caos financiero».
Una enmienda que introduce también el carácter indefinido de la norma y que, según ha manifestado el consejero de Presidencia, «espero que cuente con el voto unánime de todos los diputados de las Cortes», en clara referencia a los del Grupo Parlamanterio Socialista.
Porque todos los ex consejeros y ex directores generales pertenecen al PSOE debido, como es lógico, a que todos los Gobiernos de Castilla-La Mancha, hasta la presente legislatura, han sido socialistas.