El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, ha denunciado el «tufillo político» con el que está obrando la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT) por los peces aparecidos muertos en el Tajo, de forma que “esperaba que dijeran que los he echado yo al río ya muertos».
García-Page ha hecho estas declaraciones tras el continuo cruce de acusaciones entre la CHT, que culpa de la mortandad de los peces a una fuga accidental del colector municipal de Toledo, y el Ayuntamiento, que niega tajantemente esta causa, pues argumenta que el colector está roto desde hace años y recalca que es atribuible al bajo caudal del río y a la falta de oxígeno.
Tras asistir a un acto en Albacete, el también secretario general del PSOE de Castilla-La Mancha ha comentado literalmente: «Se han quedado cortos, yo me estaba esperando, en vista de que llevan un año dándome leches por todos los lados, que me dijeran que los he echado yo al río ya muertos».
El alcalde toledano ha afirmado que «es increíble que la confederación, que es la responsable del río, nos traiga una cloaca, y no se les ocurra otra cosa que echarle la culpa a la ciudad de Toledo, que es la víctima número uno de un problema como es el trasvase». Después ha dicho una vez más sobre los planteamientos de la CHT que «lo que me extraña es que no se les haya ocurrido pensar que los he sacado de la bañera de mi casa para echarlos al río».
«EL TUFILLO POLÍTICO DE LA CHT ES MAYOR QUE EL DEL PROPIO RÍO»
García-Page ha agregado que «llevamos días asistiendo a ceremonias complicadas y el responsable de que el río venga limpio busca todos los culpables del mundo, por supuesto con un tufillo político, porque hay más tufillo político en la confederación con esas declaraciones que en el propio río».
Asimismo, ha considerado «razonable» que Izquierda Unida haya planteado llevar el asunto a la Fiscalía como un posible delito ecológico, porque «está en su derecho». En este sentido, el regidor toledano ha subrayado que «los informes de los técnicos municipales del Ayuntamiento son clarísimos acerca de las condiciones en que viene el río y sobre todo con el poco caudal que viene».
«El río viene sin oxígeno y sucio, nos llega literalmente una cloaca de la depuración de Madrid. Esto lo sabe cualquiera, no hace falta llevar 44 años como yo naciendo y viviendo en Toledo para sabelo», ha aseverado.