El Gobierno de Castilla-La Mancha ha justificado las nuevas medidas de ajuste anunciadas por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en la «situación de emergencia nacional, social y económica» del país y, por tanto, «hay que hacer lo que hay que hacer». Así se ha expresado la consejera de Empleo y Economía, Carmen Casero, en una entrevista en Radio Castilla-La Mancha, quien ha comparado la situación económica que ha encontrado Rajoy a la que halló la presidenta regional, María Dolores de Cospedal, cuando hace un año tomó las riendas de la región con 10.800 millones de deuda.
«Cuando un gobierno llega y se encuentra los cajones llenos de facturas sin pagar, la situación es de emergencia y requiere medidas contundentes», a fin de evitar la «quiebra del estado de bienestar», ha dicho la titular de Empleo y Economía.
En este sentido, Casero ha indicado que el gobierno de Cospedal ha sido uno de los ejecutivos autonómicos que más medidas ha adoptado contra el «despilfarro», del que se ha hecho un «expurgue».
Y, en esa línea tenemos que seguir, ha dicho la consejera de Empleo y Economía, quien ha recordado que aquellas comunidades que no cumplan se verán sometidas a «controles muy rigurosos». «No tenemos elección», ha insistido.
Quien no cumpla con la Ley de Estabilidad y «se salga de la línea», ha añadido Casero, serán tuteladas y el Gobierno deberá tomar cartas en el asunto, aunque en el caso de Castilla-La Mancha, «tenemos hechos los deberes».
Sobre las acusaciones socialistas de que el Gobierno regional quiere acabar con el estado del bienestar, la titular de empleo ha tachado de «memeces» estas afirmaciones cuando han sido los socialistas los que han causado el problema.