«El 27 de julio de 2011 tomé posesión y desde entonces se han detectado una serie de irregularidades por valor de 541.240 euros». O, lo que es lo mismo, 90 millones de pesetas. 20 minutos después de comenzar su intervención el periodista Nacho Villa, director general del Ente Radio Televisión Castilla-La Mancha, dio con el quid de la cuestión: el motivo de la querella criminal que presentó hace unas semanas contra el ex director general del Ente, Jordi García Candau. O sea, su antecesor en el puesto durante los años de Gobierno del PSOE en la comunidad autónoma.
Villa dijo previamente que tenía datos «de la máxima gravedad política y judicial», que por eso había presentado la querella por tres presuntos delitos: malversación de caudales públicos, prevaricación y fraude; y que la querella la tendrá que estudiar ahora el Juzgado número 5 de Toledo.
En su cuarta comparecencia en las Cortes de Castilla-La Mancha en sólo un año, Villa quiso aclarar que su querella «no supone ni presupone el reflejo de ninguna estrategia que suponga un ataque personal contra nada ni contra nadie. No he levantado alfombras, ni he abierto armarios secretos ni he bajado a sótanos sin luz eléctrica. Sólo tengo una obsesión: la claridad, la honradez y la administración de los fondos públicos de los castellanomanchegos».
«INFORMES POR VALOR DE 276.000 EUROS QUE NADIE HA ENCONTRADO»
El director general del Ente RTVCM pasó a explicar el contenido de la querella de forma pormenorizada. Como, por ejemplo, «siete informes por valor de 276.000 euros, informes que nadie ha encontrado». Se los desglosamos:
Informe del 1 febrero de 2010, para mejorar la oferta de programación musical de Radio Castilla-La Mancha (RCM), por valor de 49.380 euros.
Informe del 10 febrero de 2010, para evaluar algunos aspectos de RCM: 15.300 euros.
Informe del 10 febrero de 2010, análisis sobre expectativas y programación de RCM: 20.500 euros.
Informe del 10 febrero de 2010, análisis sobre preferencias y expectativas en la programación televisiva de Castilla-La Mancha Televisión: 29.500 euros.
Informe del 10 julio de 2010, valoración de presentadores para un concurso de televisión.
Informe del 20 octubre de 2004, estudio, imagen y valoración de RCM y de CMT: 44.000 euros.
Informe del 30 octubre de 2009, observatorio para seguimiento del apagón analógico sobre las audiencias de televisión: 100.000 euros.
Villa insistió en que los citados siete informes o estudios no han aparecido en ningún momento.
«HAY DÍAS QUE SE ME ABREN LAS ENTRAÑAS… ES EL APROVECHAMIENTO MÁS IRRESPONSABLE»
«Hay días que se me abren las entrañas de pensar que alguien ha podido hacer negocio privado con la radio y la televisión públicas de Castilla-La Mancha, es el aprovechamiento más irresponsable que se puede hacer del dinero de los ciudadanos». Nacho Villa continuó.
Dirigiéndose al diputado socialista José Manuel Caballero, le espetó: «Ustedes me decían que no sugiriera y que si había algo que denunciar, que fuera a los Tribunales. Bien, pues lo he hecho. No es nada agradable, pero es mi obligación cumplir con ello».
El director de la televisión autonómica dijo que, un año después de haber llegado a la «casa», «estamos desmadejando una auténtica maraña que había montada en torno al ente público. No tengo prisa, pero tampoco pausa. Se utilizaba sin ton ni son el dinero público y queremos que se sepa qué se ha hecho con todo el dinero que se ha gastado en todos estos años en la tele y la radio públicas».
Llegó incluso a decir que la de Candau era «una televisión faraónica que tenía unos gastos desmesurados y en muchos casos no justificables desde el punto de vista profesional. Lo que yo he visto que se ha hecho dentro en épocas de bonanza… ¡Sobrecoge, señores! Y que nadie vea en esto una caza de brujas».
INFORMES CON LA UNIVERSIDAD REY JUAN CARLOS «QUE, SEPAMOS, NO SE LLEVARON A CABO»
Al margen de los siete informes anteriores, Villa también ha hablado de la supuesta elaboración de otros dos a través de un convenio del Ente RTVCM y la Universidad Rey Juan Carlos.
El primero de ellos, por valor de 50.000 euros y de fecha 1 de octubre de 2009, sobre la identidad castellanomanchega y la televisión. El segundo, también por valor de 50.000 euros, justo un año más tarde, sobre la televisión y su identidad en un entorno digital.
Sobre estos dos informes, Villa llegó a decir que «no nos consta que haya ningún trabajo de la Universidad Juan Carlos». Y dio el nombre del supuesto autor de esos dos estudios: Juan Menor Sendra, profesor de la citada Universidad. Estudios que, sepamos, no se llevaron a cabo o no los tenemos».
Villa aclaró que no era casualidad que, anterior a la firma de estos dos estudios, «Menor firmó dos contratos consecutivos, en marzo de 2008 y en diciembre de 2009, a dos empresas diferentes, por un importe mensual de 7.500 euros. Era un asesor externo del Ente público mientras era profesor en la Rey Juan Carlos».
De Menor dijo que «era contratado a través de una relación mercantil por 7.500 euros al mes como asesor externo. Y no podía cobrar dos sueldos públicos simultáneos», uno el de la televisión autonómica y otro el de la Universidad pública.
Según Villa, «cuando saltó esta situación a la opinión pública se revocaron esos dos contratos públicos y se encauzó todo a través de la Universidad. Se encargaron dos informes que, según el contrato, era obligatorio que los hiciera él (por Menor) y que estaban facturados a través de la Universidad. Así él seguía cobrando ese dinero. No existen esos informes, que puedo calificar de fantasmas porque no existen».