El Banco de Alimentos de Toledo concluirá mañana el reparto de 97.000 kilos de productos alimenticios que, distribuidos por el Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA) de excedentes aportados por la Unión Europea, se distribuirán entre un total de 103 asociaciones benéficas de toda la provincia.
El presidente del Banco de Alimentos de Toledo, Manuel Lanza, ha explicado que mañana concluye la primera fase, iniciada el pasado jueves, del plan de ayuda de este año que repartirá 97.000 kilos de alimentos, en concreto leche, gallegas y pasta, a 103 entidades benéficas reconocidas «que tratan de mitigar el hambre» y que, a su vez, las distribuyen a los colectivos o personas más necesitadas.
Con esta primera remesa anual, la institución benéfica, creada en 1997, dará atención «a unas 17.000 personas», cifra que ha crecido notablemente en estos últimos años de crisis, y con personas que «no son, con antes conocíamos, pobres de solemnidad», ha razonado Lanza.
Unos servicios, ha añadido Lanza, que se prestan a través del conocido como entidad de consumo, «con reparto por ejemplo a los conventos, para su propio consumo», y de reparto, que se dona a las Cáritas parroquiales, comedores sociales, residencias o servicios sociales de municipios de toda la provincia.
Lanza ha agradecido la implicación de empresas y firmas privadas, pero ha hecho un nuevo llamamiento a toda la sociedad para que ayude con la aportación de productos no perecederos, especialmente aceite y legumbres, como arroz, garbanzos, judías o lentejas.
En este sentido, ha reseñado la gran rentabilidad que se ofrece y ha recordado que «si un kilo de alimentos lo valoramos en un euro, cada uno que recibimos lo transformamos en 60 euros entregados».
Y ha confirmado que el pasado año su asociación repartió 1.184.000 kilos de alimentos, de los que 824.000 correspondieron a las donaciones de la FEGA y los 360.000 restantes de empresas agroalimentarias colectas en grandes superficies o donaciones de particulares, con únicamente un presupuesto de 15.000 euros.
En este sentido, Manuel Lanza ha subrayado que su entidad no recibe ayudas oficiales y cubre sus gastos generales de pequeñas contribuciones de entidades financieras, socios benefactores y el trabajo desinteresado de una veintena de colaboradores.