El desempleo, los recortes económicos, la educación, la sanidad, la deuda pública, la desconfianza en la política y la corrupción política son, por este orden, los temas que más preocupan a los castellanomanchegos. Así se desprende del barómetro regional elaborado por el Colegio de Ciencias Políticas y Sociología de Castilla-La Mancha que ha sido presentado en Toledo.
Otro de los aspectos destacados es el equilibrio que existe en la valoración de la gestión del PP al frente del Gobierno regional y es que, sin obtener el aprobado, hay un 38 por 100 que la considera «mala» o «muy mala», un 33 por 100 que la considera «regular» y un 27 por 100 que cree que es «buena» o «muy buena». A este respecto, Cuenca es la provincia que mejor opinión tiene y Toledo la de peor opinión.
Por ello, Jesús García, del colegio profesional, ponía de manifiesto que «la batalla política en Castilla-La Mancha está en el centro, más incluso que en cualquier parte de España; el que quiera ganar unas elecciones en la región debe ser especialmente moderado». Son los jóvenes y los mayores de 65 años los que hacen una valoración más negativa del Gobierno, siendo del 4,26 la nota media que los 580 encuestados en todo el territorio de la comunidad ponen al PP.
En cuanto a los líderes es significativo el alto índice de conocimiento que tienen los castellanomanchegos de ellos. Los dos superan el 60 por 100 que se exige para optar a la elección con unas mínimas garantías. María Dolores de Cospedal tiene un 97,4 por 100 de índice de conocimiento mientras que Emiliano García-Page tiene un 75,5 por 100. En cuanto a la valoración que hacen de ellos, en una puntuación del 0 al 10 a Cospedal suspende con un 4,2 y García-Page aprueba con un 5.
Desde el Colegio de Ciencias Políticas y Sociología de Castilla-La Mancha explican que este barómetro responde a la necesidad de ofrecer una mirada sociológica de carácter regional, y es que las de carácter nacional son, consideran, difícilmente extrapolables a la comunidad.
La encuesta deja ver el pesimismo de los castellanomanchegos por la situación política y económica. Sobre la primera, el 28,3 por 100 dice que es «muy mala», el 32,9 por 100 que es «mala», el 28 por 100 que es «regular» y solo el 10 por 100 estima que es «buena».
Más del 80 por 100, concretamente el 81,7 por 100, valora la situación económica actual «mala»o «muy mala», solo el 15,3 por 100 dice que es «regular» y el 2,8 por 100 que es «buena».
Por otro lado, en términos generales los castellanomanchegos perciben su situación personal mejor que la del contexto y es que el 45,3 por 100 la ve «regular», el 21,9 por 100 «mala» y el 24,9 por 100 «buena».
En el horizonte de a un año la mayoría de los encuestados cree que la situación política será igual (un 48 por 100 frente al 23,8 por 100 que cree que será «peor» y un 27,7 por 100 que dice que será «mejor»). En cuanto a la situación económica dentro de un año, la opinión de los sujetos encuestados se divide proporcionalmente entre las tres opciones posibles: un 32,6 por 100 dice que «mejor», un 36,9 por 100 que «igual» y un 30,5 por 100 que «peor». La mayoría espera que su situación personal sea «igual» (53,5 por 100).
Esta visión de la situación económica en el horizonte de un año difiere en función de los votantes y es que mientras que el votante del PP cree en mayor medida que será «mejor», el del PSOE considera que será «peor».