Más de 3.500 personas, según CC.OO., se manifestaron desde el centro de trabajo de Teletech en el polígono industrial de Toledo hasta la plaza de la plaza de Zocodover, en el centro histórico, para exigir el mantenimiento de la actividad y de los 650 los empleos que tiene la empresa de call center y que presta servicios de atención al cliente a Vodafone en España.
Las 650 personas cuyo despido tramita ya la multinacional estadounidense Teletech, casi todas jóvenes y mayoritariamente mujeres, han contado con el respaldo de 150 compañeros suyos del centro de Teletech en Madrid y, sobre todo, de unos 3.000 toledanos que se han ido sumado a la manifestación a lo largo de su recorrido, de más de 13 kilómetros.
El delegado sindical de CC.OO. en Teletech, Álvaro Gómez, se ha mostrado «sorprendido y muy satisfecho por la respuesta masiva» que ha tenido esta manifestación. Gómez y sus compañeros y compañeras han agradecido el apoyo que están recibiendo por parte de la sociedad toledana, y han vuelto a reclamar a las autoridades políticas «que se pongan las pilas y busquen una solución» para mantener la actividad y el empleo del call center toledano.
Gómez ha alertado de que, hasta que no se encuentre una solución al conflicto laboral planteado por Teletech, el comité de empresa y toda la plantilla van a seguir organizando acciones de protesta y mantendrán el encierro en el centro de trabajo, donde llevan durmiendo desde el lunes 16 de julio.
Para encontrar las soluciones, el comité de empresa ha pedido esta misma mañana una nueva reunión con los representantes del Gobierno de Castilla-La Mancha (PP) y del Ayuntamiento de Toledo (PSOE). Gómez ha insistido en que «los queremos y los necesitamos juntos y remando en la misma dirección».
«Nosotros también queremos que nos rescaten; pero no queremos subvenciones. Lo que queremos es trabajar», ha recalcado. «No somos vagos, queremos trabajar», es uno de los «gritos de guerra» de los trabajadores de Teletech.
Por su parte, el secretario general de Comfia CC.OO., José María Martínez, que también se ha sumado a la manifestación de Teletech-Toledo, ha reivindicado una solución a este conflicto, que a su entender «no es solo laboral, sino también social, porque las empresas tienen muchas partes y están los trabajadores, los empleadores, las autoridades y los consumidores».
Así, en alusión a Vodafone, ha apuntado que, desde el punto de vista de la responsabilidad social, «las empresas deben saber que sus políticas impactan en la realidad social» y ha considerado que el impacto de despedir a 650 trabajadores en Toledo será alto.
«Cualquier empleador y cualquier cliente tienen que valorar cuál es el impacto y cuál su responsabilidad», ha señalado Martínez.
A su entender, el cierre de Teletech «no es un expediente de regulación de empleo cualquiera, sino un caso extraordinario porque se trata de un cierre patronal», por lo que ha reivindicado «indemnizaciones razonables y justas» para los trabajadores e incluso ha señalado que algunos trabajadores eventuales se encuentran en fraude de ley.
Ha exigido que Teletech «trate a los trabajadores dignamente» para proceder al cierre; ha insistido en recordar la responsabilidad de Vodafone y ha pedido a las autoridades públicas que busquen una empresa que asuma la carga de trabajo en Toledo, en Valencia y en Madrid.
En el caso concreto de Toledo, ha afirmado que «la plantilla muy capaz y muy profesional y, además, hay unas instalaciones que son propiedad de la Junta, que debería tener interés en rentabilizarlas».
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