La concejal de Bienestar Social, Ana Saavedra, y la de Accesibilidad, María Teresa Puig, del Ayuntamiento de Toledo han comprobado el resultado final de las guías podotáctiles instaladas en las escaleras mecánicas de Recaredo para los invidentes que deseen utilizar esta infraestructura. La obra, que ha tenido un presupuesto de 7.000 euros, ha sido financiado por la Obra Social de Globalcaja.
Las concejalas se han acompañado en su visita del presidente del Consejo Territorial de la ONCE, José Martínez, del director general de Globalcaja, Pedro Palacios, y del responsable de la Obra Social de Globalcaja, Francisco Díaz-Salazar, quienes han podido comprobar la utilización de esta herramienta que pretende facilitar el tránsito a las personas con dificultades visuales.
El proyecto, contemplado como una actuación incluida en el Plan Municipal Integral para la Accesibilidad de la ciudad de Toledo, consiste en la instalación de tramos de guías podotáctiles en las escaleras mecánicas del Paseo de Recaredo ya que, anteriormente, las personas con discapacidad visual tenían problemas de orientación en este espacio entre los distintos tramos de escalera al no encontrarse en línea recta, por lo cual debían realizar giros para desplazarse entre ellos.
Esta instalación consiste básicamente en conectar los distintos tramos de escalera, mediante franjas rugosas instaladas en el suelo para direccionar a las personas con discapacidad visual total o parcial, en un punto estratégico para el acceso al Casco Histórico.