Una persona disparó el pasado jueves con una escopeta de aire comprimido contra el coche de unos agentes de la Policía Local de Guadalajara que estaban deteniendo a una persona por resistencia a la autoridad, amenazas a los agentes y conducir un vehículo a motor bajo la influencia de alcohol y drogas.
El Ayuntamiento de Guadalajara ha informado en un comunicado de que los hechos tuvieron lugar por la noche en la calle Antonio Machado, del barrio de Escritores, cuando A.V.R., de 51 años de edad, golpeó con la furgoneta que conducía a un vehículo estacionado y se negó a efectuar un parte amistoso con el dueño del coche dañado, lo que motivó la presencia de unos agentes de Policía Local.
Según explica la nota, a pesar de la presencia de los agentes, el acusado siguió negándose a facilitar sus datos, y comenzó a proferir «amenazas» e «insultos» a los policías, que le solicitaron que se sometiera a una prueba de detección de alcohol y drogas.
Ante su negativa reiterada a efectuar las mismas, los agentes lo detuvieron, pero el acusado mostró una fuerte resistencia, que hizo necesaria la intervención de cuatro agentes, que resultaron heridos leves.
Precisamente, cuando se estaba procediendo a su detención, se congregó un numeroso grupo de personas con intención de impedirlo, y, desde una ventana, una persona que no ha sido identificada efectuó un disparo con una escopeta de aire comprimido a los agentes, que impactó contra un vehículo patrulla.
Finalmente, se instruyó un atestado por negativa a realizar las pruebas de detección alcohólica y de drogas tóxicas, y otro por conducir un vehículo a motor bajo la influencia de alcohol y drogas, además de un delito de resistencia a agentes de la autoridad y amenazas.
Por otra parte, la Policía Local también detuvo ese día a R.F.L., de 18 años y vecino de la capital, acusado también de conducir bajo los efectos del alcohol y las drogas.
Los agentes detuvieron al acusado después de que éste ignorara la señal de detención y chocara contra una señal de tráfico, una farola y también contra un vehículo estacionado, tras haber conducido en dirección contraria.
Según el parte policial, el detenido conducía con el paragolpes delantero arrastrando por el suelo y sin el neumático de rueda delantera izquierda, y fue incapaz de realizar las pruebas de alcoholemia en un principio, aunque finalmente, tras efectuarlas, arrojó un resultado positivo de 0,95 miligramos de alcohol por aire espirado, así como un resultado positivo por consumo de cannabis y cocaína en un test de orina.
Además, en el vehículo que conducía le fue intervenida una pequeña cantidad de sustancia estupefaciente.