El piragüista español Paco Cubelos, que con sólo 19 años disputó hoy la final olímpica de K1 1.000 metros de los Juegos Olímpicos de Londres 2012, se mostró algo decepcionado con su séptima posición ya que esperaba «luchar un poco más».
«El primer objetivo era entrar en la final pero hoy me hubiera gustado luchar un poco más. Me encontraba muy bien de fuerzas y al final podía haber dado más pero he sufrido mucho muscularmente, especialmente en los antebrazos, y no he podido exprimirme al máximo», explicó a Efe el joven deportista.
El palista de Talavera de la Reina realizó un registro de 3:32.521, seis segundos más lento que el campeón noruego Erik Veraz Larsen y solo una décima más que el sexto clasificado, en una carrera en la que fue de menos a más.
«Tenía a mi izquierda el danés que era una buena referencia. Decidí dejar que se fuera un poco para reservar fuerzas y luego remontar en los últimos metros, aunque me quedé corto», señaló.
ORGULLOSO DE SU DIPLOMA
A pesar de la decepción por su actuación y los problemas en sus antebrazos que afectan a su rendimiento, Cubelos se mostró orgulloso de su participación en sus primeros Juegos Olímpicos, de los que se lleva un meritorio diploma.
«Es un gran logro. Hace un año, cuando salté a absoluto, nadie lo esperaba. Los rivales de la final eran muy fuertes y yo era como el tapado. Aun así, no me he podido emplear al máximo ni exprimirme del todo. Son situaciones de carrera que pueden pasar pero es una pena que haya pasado aquí», lamentó el palista.
«No me conformaba con estar a la final pero, bueno, no venía como favorito y al menos he conseguido ganar a uno y casi a dos», añadió Cubelos, que ahora solo quiere descansar y recuperar fuerzas para la próxima temporada.